El director del Centro de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Rafael Sarmiento Álvarez, dijo que hasta el momento se han dejado de invertir un millón 200 mil pesos en la construcción de la autopista Durango Mazatlán ?tramo Garabitos Otinapa-, luego del bloqueo de la obra encabezado por grupos de ejidatarios inconformes con las negociaciones del Gobierno del Estado.
Dijo que el personal técnico comisionado por el Gobierno del Estado no hizo bien el trabajo de negociación; incluso, la deficiencia ha propiciado riesgos en la operación y avance de los trabajos correspondientes a la SCT, contratados en dos empresas.
Precisó que desde el ofrecimiento de 50 mil pesos por hectárea afectada por el trazo de la supercarretera, la negociación para obtener el derecho de vía y los convenios de ocupación previa estaba mal planteada por la autoridad estatal.
El Gobierno Estatal ?que concluyó ayer- ?dejó un problema sin resolver y que tenemos que ver con los nuevos funcionarios la manera de resolverlo?, apuntó.
El bloqueo de la obra implica pérdidas e intereses financieros ociosos, en virtud de que la maquinaria de las empresas está parada y es preocupante.
El Gobierno Estatal era el responsable de concretar la liberación de los derechos de vía, pero lamentablemente no lo hicieron, y esto provocará retraso, dado que los nuevos funcionarios tendrán que esperan instrucciones, y se perderán jornadas de trabajo, que en términos económicos representan 600 mil pesos diarios, añadió.
Sarmiento anunció que buscará una audiencia urgente con el gobernador Ismael Hernández Deras, con la finalidad de desatorar esta situación y no perder tiempo y recursos en la realización de esta obra carretera, asentó el funcionario.
BLOQUEO
Piden 50 mil pesos por hectárea
Ejidatarios de las comunidades El Pino y otras localidades rurales que serán afectadas por el trazo de la supercarretera Durango-Mazatlán seguían hasta ayer con el bloqueo de los trabajos de esta obra carretera, impactando todo el tramo de Garabitos-Otinapa.
Desde el lunes, un grupo de ejidatarios regresaron a las posiciones radicales y bloquearon los trabajos de las empresas constructoras, en señal de protesta por el presunto incumplimiento en el precio de las tierras que serán expropiadas para el trazo carretero.
Los ejidatarios plantearon obtener hasta 50 mil pesos por hectáreas, mientras que la autoridad estatal ofreció no más de cuatro mil pesos en la ultima negociación.