Anuncia República Dominicana la retirada de sus tropas de la nación árabe.
AGENCIAS
BAGDAD, IRAK.- Unos 22 detenidos murieron y otros 92 resultaron heridos ayer como consecuencia de un ataque con bombas de mortero a una prisión de Bagdad administrada por las fuerzas de la Coalición liderada por Estados Unidos.
Un portavoz del Ejército dijo que el ataque se produjo por la mañama y que 25 de los 92 heridos habían sido trasladados de la prisión de Abu Ghraib, en el oeste de Bagdad, a hospitales de las bases de la Coalición.
La cárcel de Abu Garib era el mayor y más temido centro de reclusión en la época del depuesto presidente iraquí Saddam Hussein y ha sido reutilizada, también como penitenciaría, por las fuerzas de la Coalición.
Kimmit también reveló que un soldado estadounidense murió y cuatro resultaron heridos en un ataque contra el convoy militar en la ciudad septentrional iraquí de Mosul.
El uniformado murió en el hospital militar a consecuencia de las heridas recibidas cuando patrullaba por el barrio de Islah, agregó la fuente, sin facilitar otros detalles.
Más de 600 soldados estadounidenses han perdido la vida en Irak desde que comenzara la guerra y la invasión de este país el 20 de marzo de 2004.
En cambio, la tensión cedió en dos convulsionadas ciudades iraquíes, mientras regía una tregua en el bastión sunita de Fallujah y tropas estadounidenses se disponían a retirarse de una base cercana a Nayaf, donde un clérigo rebelde permanece atrincherado.
En el frente de Fallujah, los soldados norteamericanos continúan con su repliegue, mientras la población civil comienza a regresar a sus casas.
Testigos relataron ayer que las tropas de ocupación, que asedian Fallujah desde principios de abril, permitieron durante la mañana la entrada en la ciudad de civiles procedentes de Bagdad.
La medida responde a un entendimiento alcanzado ayer en una reunión en la que participaron representantes de la Coalición y del Consejo de Gobierno interino junto a una delegación de líderes civiles de Fallujah.
En dicho acuerdo, se exige que los insurgentes entreguen las armas pesadas, como morteros y lanzagranadas, para suscribir un alto el fuego permanente.
Cientos de iraquíes y decenas de soldados de Estados Unidos (EU) murieron en los violentos enfrentamientos que se desencadenaron en Fallujah el pasado cinco de abril, pocos días después del asesinato y la mutilación en esa ciudad de cuatro contratistas norteamericanos.
Según portavoces de la Coalición, el entendimiento alcanzado permitirá “el libre acceso (de los habitantes de Fallujah) al hospital general de la ciudad, así como la retirada y el entierro de los muertos y el envío de comida y medicinas a áreas aisladas”.
En el mismo, las tropas de EU prometen, entre otras cosas, reducir el toque de queda y permitir el regreso a Fallujah de 50 familias cada día, si los insurgentes entregan sus armas.
Tensa calma
En el frente sur, donde los soldados ocupantes cercan la ciudad santa de Nayaf, la tensión se mantiene mientras a los negociadores se les ha dado más tiempo para tratar de llegar a una solución pacífica.
“El problema de Muqtada al Sadr (el líder radical shii sublevado) es más grande que el propio Al Sadr. Abarca a toda la comunidad shii y a sus santuarios”, dijo a sus soldados el general Ricardo Sánchez, comandante jefe de las fuerzas estadounidenses en Irak.
“Existe un puñado de iniciativas para resolver la crisis. Pese a ellos, nuestro principal objetivo es Al Sadr”, agregó Sánchez, quien además reiteró la intención de EU de matar o capturar a Al Sadr. El joven clérigo hizo estallar hace tres semanas una insurrección en el centro y sur de Irak con su llamamiento a la desobediencia civil en todo el país.
Coalición fracturada
Además de lidiar con continuos enfrentamientos con grupos insurgentes y con una oleada de secuestros de extranjeros, Estados Unidos debe afrontar las primeras grietas en el seno de la coalición apenas diez semanas antes de la prevista devolución de la soberanía al pueblo iraquí.
España anunció el lunes que había comenzado a retirar sus mil 300 soldados de Irak, mientras el presidente de Honduras Ricardo Maduro, anunció la noche del lunes el retiro “en el menor tiempo posible y en condiciones de seguridad” de las tropas hondureñas de Irak.
Siguiendo el ejemplo, el presidente dominicano, Hipólito Mejía, dispuso la retirada de las tropas de su país de la nación árabe “a la mayor brevedad posible”, anunció el secretario de las Fuerzas Armadas del país, José Miguel Soto Jiménez.
Soto Jiménez confirmó que Mejía dio la orden de retorno a la Fuerza de Tarea Quisqueya, integrada por unos 300 soldados, tras la decisión del Gobierno español.
Pero la Casa Blanca reiteró que la Coalición permanece estable y dijo que la administración Bush esperaba que una nueva resolución de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para Irak llevaría a otras naciones a proveer seguridad y a prestar asistencia para la reconstrucción.
Japón repitió que sus tropas permanecerán en Irak, pese al secuestro y posterior liberación de cinco ciudadanos de ese país.
En Roma, el enviado especial de las Naciones Unidas a Irak, Lakhdar Brahimi, dijo que las posibilidades de que la ONU adopte una nueva resolución sobre el país árabe en un futuro cercano son “extremadamente buenas”.
Establecen tribunal
para juzgar a Hussein
Los líderes iraquíes han establecido un tribunal destinado a juzgar al derrocado dictador Saddam Hussein y a otros miembros de su depuesto régimen, informó ayer Intifaq Qanbar, portavoz del partido shii Congreso Nacional Iraquí (CNI).
Al frente del mismo se ha colocado a Salem Chalabi, sobrino del líder del CNI, Ahmed Chalabi, que coordinará las acciones de siete jueces y cuatro fiscales generales.
Añadió que el tribunal, al que se le ha asignado un presupuesto de 75 millones de dólares para el primer año, tendrá como primera misión establecer los cargos por los que habrá de ser juzgado el ex Mandatario y sus colaboradores.
“En el futuro se sumarán más jueces y abogados al tribunal, tras formarse en Ley internacional, crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad”, apostilló Qanbar.
El tribunal ha sido formado por un comité del Consejo de Gobierno provisional iraquí, que había sido aprobado por el administrador civil para Irak, Paul Bremer.
Saddam Hussein fue capturado el pasado 13 de diciembre cerca de su ciudad natal de Tikrit y permanece retenido por las tropas de ocupación a la espera de un eventual juicio para el que todavía no se ha fijado fecha.
“ODIO ÁRABE”
El presidente egipcio, Hosni Mubarak, considera que existe “un odio sin precedente” contra Estados Unidos en el mundo árabe, a raíz de la guerra de Irak y afirma que la primera causa del terrorismo es “la injusticia” en una entrevista que publica ayer el diario parisino Le Monde.
Mubarak señaló que es “indispensable” que la Organización de las Naciones Unidas tenga un papel político y social.
Si la transferencia de poder se hace con inteligencia, si se llega a algún tipo de entendimiento entre suníes, shiies y kurdos –“y eso tomará tiempo”-, si las fuerzas de la coalición abandonan “el interior de las ciudades y las regiones habitadas”, y si el pueblo tiene realmente la sensación de ser “dueño de sus decisiones”, entonces “quizás” el país podrá ser estabilizado.
Para Mubarak, los problemas de Irak y el conflicto israelí-palestino tienen que resolverse “a la par”: “es imposible resolver uno de los problemas sin el otro”.
El líder egipcio, que reiteró sus críticas al plan de Washington para el Gran Oriente Medio, acusó a EU de “explotar” la religión, lo que es “peligroso”.
“Los estadounidenses han utilizado el Islam contra el comunismo. Y hoy dicen que el Islam es un peligro. No hay que inmiscuirse en la fe y las creencias de la gente”, dijo Mubarak.
En Irak, EU dijo que no permitiría la instauración de un Estado islámico, con el resultado de que la gente está aún más apegada a su religión, observó el presidente egipcio.
SENTIMIENTOS ENCONTRADOS
Algunos iraquíes consideran la retirada de las tropas españolas una pérdida, mientras otros, cada día más opuestos a la presencia de Ejércitos extranjeros en Irak, desconfían de las declaraciones y prefieren aguardar hasta ver el repliegue.
*“Al final no creo que se vayan a retirar, aunque hayan anunciado que lo van a hacer. En el último segundo cambiarán de decisión y permanecerán en Irak”, dice incrédulo Jalid Ali, estudiante en la Escuela de Comercio de la universidad de Bagdad.
*“El problema en Diwaniya es que los estadounidenses reemplazarán a los españoles y entonces echaremos de menos a los españoles, porque el comportamiento de los soldados estadounidenses con los iraquíes es el peor de todas las fuerzas de ocupación”, apunta Basem Tamimi, un habitante de Diwaniya, que reside actualmente en Bagdad, espera que el resto de las tropas extranjeras sigan el ejemplo de España y se retiren de Irak.
*Arkan Fadel, ingeniero civil, considera que la retirada de las tropas españolas en Irak tendrá en primer lugar un impacto negativo en las fuerzas de la Coalición porque EU se enfrenta en estos momentos a una grave crisis y aumentará el caos. “La retirada de España animará a otros países miembros de la Coalición a retirar sus tropas porque los españoles son, junto a los británicos, los aliados más importantes de EU”.
*Saad Abdel Rasak, un habitante del barrio al Mansur, un área de Bagdad donde predomina la burguesía suní, aplaude la decisión del presidente español. “Se trata de una gran decisión. La retirada de tropas enemigas, de una fuerza ocupante, de miembros de la Coalición es algo bueno para nosotros”, afirma.
*“Queremos amistad y cooperación y no un Ejército de ocupación. La ocupación es lo que ha corrompido las relaciones entre Irak y otros países”, afirma Muhamad Saleh, un soldado retirado y habitante del barrio de a Dura, al sur de Bagdad.
FUENTE: EFE