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BOSTON, EU.- El quarterback de los Patriots Tom Brady y el propietario Robert Kraft, alzaron ayer sendos trofeos del Súper Tazón, mientras miles de aficionados salieron a las calles de Boston para ser bañados de confeti con los colores rojo, blanco y azul de los flamantes campeones de la NFL.
"¡Aquí estamos otra vez!", gritó Brady ante una multitud reunida en el City Hall Plaza de Boston, el sitio tradicional para las grandes celebraciones en la ciudad.
Brady, la figura clave en la victoria del domingo sobre las Panteras de Carolina, fue ovacionado junto a Kraft, el entrenador Bill Belichick y docenas de compañeros de equipo en el carnaval armado para celebrar la segunda corona de los Patriotas en las últimas tres temporadas.
"Nunca se nos cruzó por la menta venir aquí sin el trofeo Lombardi", dijo Brady, el jugador más valioso del Súper Tazón. "Aquí es donde debe estar, con ustedes. Un título ya fue fantástico, el segundo todavía es mejor, pero todavía quiero el tercero".
Kraft y Belichick se deshicieron en elogios por el espíritu de equipo exhibido por los Patriotas, que los llevó a ganar 15 partidos en fila, incluyendo la victoria 32-29 sobre las Panteras en Houston.
"Para que un equipo consiga sus objetivos, todos tienen que dejar a un lado sus individualidades y eso fue lo que hicieron estos jugadores y por eso son los campeones", declaró Belichick.
No se pudo conocer de inmediato cuánta gente acudió al festejo. Cuando los Patriotas ganaron el Súper Tazón de 2002 se estimó que 1,2 millones de personas llegaron a la celebración.
El equipo desfiló por la calle Boylston Street a bordo de vehículos anfibios, escoltados por policías a pie y en motocicletas.
La temperatura en Boston fue de 17 grados menos cero (32 Fahrenheit), con cielo nublado.
Pero el clima resultó cálido si se le compara con las temperaturas gélidas que fueron la característica en Nueva Inglaterra el mes pasado.
