Andrés D'Alessandro y Gabriel Heinze fallan sus disparos y permiten a Brasil ganar su séptima Copa América.
LIMA, PERÚ.- La selección de futbol de Brasil ganó 6-4 a la de Argentina la final de la Copa América Perú 2004, luego de empatar a dos anotaciones al cabo de los 90 minutos de tiempo regular y agenciarse su séptimo título del certamen.
Cristian González, de pena máxima, a los 20 minutos, y César Delgado, a los 87’, marcaron por la albiceleste, mientras Luisao, en el 45’, y Adriano, a los 93’, lo hicieron por el scratch.
Dos fueron las figuras del monarca del certamen, el guardameta Julio Cesar, por las intervenciones que mantuvieron en la pelea a su escuadra, así como el atacante Adriano, quien marcó en tiempo de compensación el gol de la igualada que mandó el juego a definición desde los once pasos y acabó como monarca de goleo con siete tantos.
Julio Cesar rechazó a Andrés D’Alessandro el primer tiro en la tanda de penales, mientras Gabriel Heinze voló el segundo por arriba del horizontal, seguidos por Luis González y Juan Pablo Sorín, quienes sí acertaron, y ya no llegó la oportunidad de tirar a César Delgado.
Brasil no falló ninguno de sus disparos, con la ejecución de Adriano, Edu, Diego y Juan para el final de 4-2 (6-4 global).
Argentina tomó el control del partido luego de un arranque disputado, donde ninguno de los dos conjuntos pudo imponer sus condiciones. Con juego por las bandas, preferentemente por la izquierda con Juan Pablo Sorín, Argentina llegó con peligro varias ocasiones.
Los "amazónicos" llegaron poco al área por la falta de conexión entre sus medios y delanteros, pues además la recuperación del balón por parte de Javier Mascherano fue superior por los argentinos.
Una de las pocas que tuvo el cuadro de Carlos Alberto Parreira fue el desborde de Maicon por la derecha, que fue rechazado por Roberto Abbondanzieri cuando Luis Fabiano ya llegaba por el centro para rematar.
Dentro del dominio que ejercían los pamperos, a los 19 minutos Luis González intentó meterse al área por la línea frontal del lado derecho, Luisao barrió y el volante de la albiceleste ya iba cayéndose para que el silbante decretara pena máxima, que ejecutó Cristian González arriba casi al centro para el 1-0.
Pese a verse abajo en el marcador, los brasileños siguieron con su estilo defensivo, en tanto los argentinos continuaron con el control del juego, pero sin reflejarlo en el marcador.
En parte porque el guardameta Julio Cesar tuvo un par de intervenciones para salvar su arco y mantener en la pelea a su escuadra, primero con una desviada a un tiro de Luis González que amenazaba irse al rincón derecho, al 27’, y después cuando se quedó con un centro de Carlos Tévez que iba a rematar Luis González al 38’.
Concluía el primer lapso cuando Brasil jugó su mejor futbol y ello le permitió igualar por primera vez el partido, en un remate del zaguero central Luisao, quien anticipó en la marca al capitán Roberto Ayala para clavar su remate abajo junto al poste izquierdo en el 45’.
Carlos Tévez tuvo en sus botines la oportunidad de adelantar otra vez a los argentinos a los 49’, cuando estrelló un remate a bocajarro en el poste derecho, ya cuando el arquero brasileño estaba superado.
El dominio siguió con tintes albicelestes, aunque ya no lograron llegar con tanta frecuencia como en el primer lapso, en tanto los "verdeamarella" empezaron a nivelar las acciones.
Los esporádicos avances que generó Brasil exigieron de más a la zaga argentina, pues Luis Fabiano y Adriano sólo esperaban tener una falla del rival para aniquilarlo.
Los minutos finales fueron de mucha intensidad y de emociones diversas, porque primero Argentina tomó la ventaja, que pareció definitiva, pero en tiempo de compensación Brasil logró alcanzar por segunda vez y forzar un desempate desde los once pasos.
Primero el atacante César Delgado aprovechó una pifia a cargo de Renato dentro del área para controlar un balón y luego cruzarlo con potencia para vencer a Julio Cesar a los 87 minutos.
Los pupilos de Marcelo Bielsa ya celebraban la conquista de su decimoquinta Copa América, incluso el estratega sacó del campo al delantero Carlos Tévez, quien mantuvo bastante ocupados a los defensas amazónicos.
Sólo que Adriano dio entonces muestras de su calidad y tras un rechace corto de Fabrizzio Coloccini, cerca de la media luna controló el esférico y con rápido zurdazo sin que cayera al suelo venció a Roberto Abbondanzieri abajo a la izquierda para el 2-2 en el 93’.
Un elemento de la banca de Brasil fue a celebrar el empate frente a la del rival, lo cual desató un pequeño conato de bronca que obligó al silbante Carlos Amarilla, de irregular actuación, a finalizar el choque y a que el título se definiera desde los once pasos con la historia ya conocida.
El silbante mostró cartulinas preventivas a Juan Pablo Sorín y Javier Mascherano, por la albiceleste, así como a Edu, Luisao y Adriano del scratch.
Las alineaciones del partido fueron las siguientes:
Argentina.- Roberto Abbondanzieri, Javier Zanetti, Roberto Ayala, Fabrizzio Coloccini, Gabriel Heinze, Juan Pablo Sorín, Javier Mascherano, Cristian González, Luis González (Andrés D’Alessandro, 74’), Mauro Rosales (César Delgado, 63’) y Carlos Tévez (Facundo Quiroga, 91’). DT Marcelo Bielsa (ARG).
Brasil.- Julio Cesar, Maicon, Luisao (Cris, 80’), Juan, Gustavo Nery, Renato, Kleberson (Diego, 54’), Edu, Alex (Felipe, 62’), Adriano y Luis Fabiano. DT Carlos Alberto Parreira (BRA).
Adriano agradece a Dios "por este momento increíble"
El delantero brasileño Adriano, autor del gol que permitió el empate 2-2 de Brasil con Argentina y obligó a la tanda de penales en la final de la Copa América, agradeció a Dios "por este momento increíble", que le permitió a su país quedarse con el título del torneo de selecciones más antiguo del mundo.
"Estoy muy feliz por esta participación, porque le hemos puesto corazón. Tengo que agradecer mucho a mis compañeros, ha sido muy importante las ganas de continuar y remontar este resultado", dijo el delantero en medio de un llanto incontenible.
El asesor técnico Mario “Lobo” Zagallo también destacó que Brasil ayer "ha sido muy fuerte, porque Argentina ha estado con todo su equipo completo y demostramos que nunca perdimos la esperanza.
"Eso ha sido muy importante para nosotros porque ahora somos campeones", dijo un Zagallo exultante.
Luis Fabiano, también sumamente emocionado, dijo que nadie sabe lo feliz que está y consideró que este título continental "era muy merecido" por los brasileños.
"Va para toda esta gente, porque tuvimos mucho equilibrio. Se lo dedico a mi familia, a todos los que me ayudaron, a todo Sao Paulo", indicó.
Maicon dijo que está "muy agradecido con todos", mientras que Kleberson destacó que Brasil "luchó hasta el final, hasta el último minuto" para ser campeón de América, grito que llenaba las gargantas de otras figuras como Alex, Julio Baptista y Julio César.
Los brasileños convirtieron en una fiesta la victoria en la tanda de penales (4-2) sobre Argentina, tras un intenso encuentro que terminó empatado a dos goles en el tiempo reglamentario.
ADIÓS PERÚ
Perú, la milenaria tierra del Imperio de los Incas, despidió ayer la 41 edición de la Copa América con una sobria y emocionante ceremonia de clausura del torneo de selecciones más antiguo del mundo.
Un grupo de doce niños con las banderas de cada uno de los países participantes en la competición, abrió el acto protocolario a los sones del "Cóndor pasa", el tema emblemático de la cultura peruana, que canta a la majestuosidad de esta ave, la más grande del mundo y Dios de los antiguos habitantes de estas tierras.
Uno de los pequeños, representante de esta Copa América dedicada a la infancia, con el patrocinio de UNICEF, pronunció un discurso en el que afirmó que en este torneo "todos ganamos" y pidió vivas "al futbol y el deporte".
Un espectáculo de danzas tradicionales peruanas interpretado por más de cuatrocientos bailarines y cien músicos en escena, identificó a las siete ciudades que acogieron durante los veinte días de la competición.
Danzas como El huayno serrano, La marinera norteña y El tondero costero alegraron con su belleza y color a los asistente al Estadio Nacional de Lima, que estallaron en aplausos cuando un grupo de "chalanes" (jinetes) realizaron un paseíllo sobre trece hermosos caballos de paso peruanos.
Los bailes típicos identificaron a Chiclayo, Trujillo, Arequipa, Tacna, Cuzco, Piura y Lima, las sedes del torneo, que por primera vez acoge una final entre Argentina y Brasil, los dos colosos del futbol sudamericano.
El "cacharpari", fastuoso baile de la fiesta de la despedida de la Virgen de la Candelaria, en la región sur del país, deslumbró sobre el campo, mientras aparecía en escena el cantautor peruano Gianmarco, intérprete del tema oficial de la Copa, "Más allá de los sueños".
"Más allá de los sueños, más cercano a mi gente vive en mí una promesa, vive en todos una fe que no se pierde. Hoy pude ver mis sueños y con todas mis ganas los hice realidad", cantó Gianmarco, mientras los danzarines bailaban la moderna tonada vestidos con sus trajes típicos.
El clímax lo puso el ingreso del "chasqui" (antiguo correo de los Incas), la mascota oficial del torneo, que se despidió en último lugar del campo, mientras una bandera con los colores del arco iris, símbolo de los Incas, hacía estallar las gargantas al grito de "Perú, Perú".
La Copa América de Perú ha permitido un reencuentro fervoroso de los peruanos con el futbol internacional, que durante tres semanas tomó el protagonismo en un país pobre pero cálido con los visitantes y orgulloso de haber mostrado su riqueza histórica, turística y humana al mundo entero.