30 de abril 2004.
Panamá, (Notimex).- El empresario Ricardo Martinelli "caminó en zapatos" de pescadores, taxistas, mecánicos, barberos, entre otros oficios, sin embargo, los sondeos le dan escasas opciones de ponerse el calzado que más desea: el de Presidente de Panamá.
"Ningún trabajo es denigrante, lo vergonzoso es no tenerlo", dijo Martinelli durante una de sus últimas faenas como recolector de basura dentro de su innovadora campaña como candidato del minoritario Cambio Democrático (CD) para las elecciones del próximo domingo.
Con su lema "caminando en los zapatos del pueblo", el acaudalado comerciante llamó la atención de simpatizantes y hasta rivales políticos por su inusual estrategia de realizar distintos trabajos a fin de conocer los problemas y necesidades de los ciudadanos.
Durante más de un año de campaña, Martinelli cumplió labores de soldador, conductor de autobús, albañil, carpintero, cocinero, cañero y múltiples facetas más para demostrar que era un "luchador para un pueblo golpeado", pese a su conocida fortuna.
Uno de los momentos más recordados de la campaña fue cuando salió a pescar sin camisa y su equipo de prensa difundió imágenes de su torso desnudo con una prominente barriga.
"En los zapatos del pueblo es el momento cuando más aprendo a sentir como piensa la gente, ahora me siento más persona porque yo pensaba que entraba a la campaña para cambiar a Panamá, pero esto me ha cambiado a mí", confesó el empresario.
Martinelli, de 52 años, obtuvo un título de Mercadotecnia en la Universidad de Arkansas, Estados Unidos y luego una especialidad de Finanzas en Costa Rica como parte de su preparación profesional para lo que sería una exitosa carrera en la iniciativa privada.
El abanderado del CD, un pequeño colectivo que él mismo fundó y preside desde 1997, está casado con Marta Linares, una corredora de seguros, con quien tiene tres hijos: Ricardo, Luis Enrique y Carolina.
Aunque se niega a revelar el monto de su fortuna, Martinelli es propietario del Super 99, una de las mayores cadenas de supermercados de Panamá, sumado a sus negocios en una azucarera y acciones en bancos, medios de comunicación y harineras, entre otras empresas.
Su incursión en la vida política comenzó en 1994 como director de la estatal Caja de Seguro Social (CSS) durante el gobierno del presidente Ernesto Pérez Balladares, pero dos años después dejó el cargo en medio de disputas con los gremios médicos.
Martinelli ha evitado seguir la tradición de otros candidatos, de cerrar sus campañas con caravanas o concentraciones masivas, y llamó a sus simpatizantes a verlo esta noche durante una transmisión televisiva y radial.
El candidato de CD culminará sus actividades unas horas antes de que el Tribunal Electoral clausure en forma oficial la campaña política.
Un millón 999 mil 553 panameños podrán acudir a las urnas el próximo domingo para elegir un nuevo mandatario.
