Río de Janeiro, (EFE).- Un cachorro del "perro de monte" (Speothos venaticus), nacido en el zoológico de Río de Janeiro, fue presentado como una nueva esperanza en la lucha por frenar la extinción de esta rara especie de cánido, antes común en toda América del Sur.
El saludable ejemplar, una hembra nacida el 27 de diciembre pasado, había sido mantenido hasta hoy lejos del contacto con el público para ayudar a su adaptación.
Conocido también en algunos países como "perro de agua", "zorro vinagre" y "zorro pitoco", era posible encontrarlo desde la frontera de Colombia y Panamá hasta el extremo sur del continente.
Pero la constante destrucción de hábitat, con la desforestación y la quema, así como el implacable exterminio de ejemplares acusados de atacar pequeños animales domésticos en granjas y caseríos, lo han colocado al borde de la extinción.
Según los expertos del zoológico de Río de Janeiro, en todo Brasil sólo hay 26 ejemplares en cautiverio, seis de ellos en el parque carioca.
Este primo salvaje de los perros domésticos, parecido a un hurón, está adaptado para vivir en regiones inundadas porque una membrana que une los dedos de sus patas le convierte en hábil nadador y buceador.
Los jóvenes alcanzan su madurez sexual al cabo de un año de vida, su ciclo de gestación es de 67 días y las madres alumbran de uno a seis cachorros por camada.
