Reuters
CARACAS, VENEZUELA.- El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, quien ayer se describió como una “mansa paloma” comparado con Jesucristo, amenazó con actuar contra sus opositores, a quienes acusó de persistir en usar la violencia para desestabilizar al país petrolero y derrocarlo.
Chávez, un militar retirado que podría enfrentar este año un referendo para sacarlo del cargo que asumió en 1999, dijo que estaba “alerta” ante un presunto plan de sus enemigos para sumir a Venezuela en la violencia, como ocurrió en abril de 2002, cuando fue derrocado brevemente por militares y civiles opuestos a su Gobierno.
“Yo soy una mansa paloma al lado de Cristo (...) a él invoco, a lo más grande, su pasión, a Dios invoco y a todos los que somos responsables invoco y llamo para que sigamos logrando lo que en estos últimos días logramos, neutralizar el plan para llevarnos a los venezolanos de nuevo por el camino de la guerra”, dijo en su programa de televisión Aló, presidente.
El Mandatario dijo que estaba seguro de que entre el viernes y sábado pasados sus adversarios tenían un plan para sembrar la violencia y pedir la intervención internacional, pero no mostró pruebas del presunto plan.
“Ellos nos quieren llevar a la violencia de nuevo. Si ustedes quieren volver por ese camino, señores conspiradores, señores golpistas, señores terroristas, se van a llevar una sorpresa mucho mayor. Yo les tenía una sorpresa anteayer (...) Estamos obligados a neutralizar a quienes intenten hacerse del poder por la violencia”, agregó.
Decenas de miles de opositores marcharon el sábado en Caracas para exigirle al Consejo Nacional Electoral (CNE) que no retrase la decisión sobre la fecha para celebrar el referendo.
El CNE, que la semana pasada tenía previsto emitir un veredicto sobre la validez de las 3.4 millones de firmas -un millón más que las requeridas- que la oposición afirma recogió para respaldar la petición de un referendo, aplazó la decisión hasta el 29 de este mes.
“El CNE tiene que revisar todo esto y para eso requiere calma y paciencia”, dijo Chávez y aseguró que respetará la decisión. El Mandatario agregó que quienes no estén de acuerdo con la resolución podrán apelarla ante el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela.
Si el referendo se celebra después del 19 de agosto y Chávez pierde la consulta, el período de Gobierno que resta hasta enero de 2007 sería ejercido por el vicepresidente, que es nombrado por el Mandatario.
La realización de una consulta popular como vía para solucionar el conflicto político venezolano fue producto de un acuerdo suscrito el año pasado entre el Gobierno y la oposición, que acusa a Chávez de querer imponer un Gobierno comunista en Venezuela.
La Organización de Estados Americanos (OEA), junto a un grupo de países, entre ellos Estados Unidos y Brasil, han impulsado la idea del referendo sobre el mandato de Chávez como una vía pacífica para resolver la crisis política que afecta al país sudamericano.