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LA PAZ, BOLIVIA.- Chile recuperó terreno en la eliminatoria sudamericana al vencer ayer por 2-0 a Bolivia en los 3,600 metros de altitud de La Paz y dejó a su adversario al borde de la eliminación en la lucha por un cupo en la Copa del Mundo Alemania 2006.
Los goles de Chile fueron anotados por Moisés Villarroel, a los 38 minutos, con una espectacular palomita tras tiro libre del capitán Marcelo Salas y por Mark González, a los 54 minutos.
Chile tiene ahora siete puntos y comparte con Uruguay el quinto puesto, mientras que Bolivia, con tres, está penúltimo.
Los chilenos jugarán en la próxima fecha en Venezuela y Bolivia volverá a ser local, ante Paraguay.
Una lluvia de aproximadamente 20 minutos precedió al choque por la quinta jornada sudamericana y dejó el césped mojado, lo que quitó ritmo al seleccionado boliviano y ayudó a los planes defensivos de Chile que tuvo en Patricio Galaz y Salas a sus hombres de punta.
El local sintió la ausencia de un conductor en el mediocampo porque Alex da Rosa, un brasileño naturalizado boliviano, no supo generar espacios para los avances de los delanteros Joaquín Botero y José Alfredo Castillo.
El cerrojo chileno funcionó a pedir de boca, porque las dos líneas de cuatro que colocó el director técnico Juvenal Olmos terminaron asfixiando a los bolivianos, quienes sólo recurrieron a disparos de media distancia, por medio del "rubio" Carmelo Angulo y de un cabezazo de Leonel Reyes.
Con el empuje del Matador
Sin embargo, las acciones más claras de gol estuvieron a merced del "Matador" Salas, quien no pudo conectar un envío aéreo ante el arquero boliviano, José Carlo Fernández, quien estaba desubicado.
Bolivia terminó diluyéndose en el medio campo, bien lejos del arquero chileno Nelson Tapia. Además, los zagueros Ricardo Rojas y Rafael Olarra fueron un muro para los desordenados y lentos delanteros locales.
Una falta de Limberg Pizarro provocó un tiro libre que fue ejecutado por Salas, su remate no pudo ser controlado por el arquero Fernández y del rebote hubo una "palomita" de Villarroel para enmudecer las tribunas bolivianas a los 38 minutos.
Para el complemento, el director técnico de Bolivia, Nelson Acosta, a través de un teléfono celular, instruyó a su ayudante, Fernando Cavallieri, el ingreso de Luis Gatti Ribeiro y el delantero Limberg Méndez, pero el entusiasmo de ambos se diluyó con prontitud porque en la cancha creció la figura del arquero Tapia.
Hubo ataques bolivianos, pero todos con desorden y Chile fue contundente en el contragolpe. En un avance por el sector derecho, Mauricio Pinilla tocó al medio y por el otro costado llegó González para conseguir a los 59 minutos el definitivo 2-0.
"Fuera Acosta...", fue el estribillo que se escuchó en el resto del partido desde las tribunas del Estadio Hernando Siles, en alusión al uruguayo nacionalizado chileno Acosta, cuya continuidad en la dirección técnica de Bolivia quedó en duda tras la derrota.
Chile consiguió ayer su primer triunfo en tres partidos que han disputado en La Paz ante Bolivia en las eliminatorias de una Copa del Mundo.
"Todo salió como queríamos", comentó al final de la fría tarde el seleccionador chileno Olmos, quien volvió a recuperar la sonrisa y el ánimo en la larga eliminatoria sudamericana.
