El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- Tienen tantas razones para celebrar, que los elementos de la Camerata de Coahuila y su director Ramón Shade no caben de la alegría.
En primer lugar, están listos para ofrecer esta noche su último concierto de la Temporada 2004 en el Teatro Nazas con un programa dedicado en su totalidad a Bach; en segundo se sienten muy satisfechos porque en esta ocasión los solistas serán elementos de la orquesta y en tercer lugar porque estrenarán el clavicémbalo que adquirieron recientemente en la Ciudad de México.
Ayer por la mañana, al finalizar el ensayo del concierto, Juan Manuel Rosales (flauta), Josef Gamilagdishvili (oboe), Sebastián Kwapisz (violín), Marina Gorbenko (violín), Mariana Chabukiani (cémbalo) y el maestro Shade dijeron encontrarse listos para llevar a cabo el recital, mismo que dará inicio a las 20:30 horas y en el cual la gente verá y escuchará por vez primera el cémbalo.
?El programa estará dedicado completamente a Bach con las obras Concierto para Oboe y Violín, Suite No. 2 y Concierto de Brandenburgo No. 5. A diferencia de otras obras de Bach esta es música alegre, no es una pasión; los tres conciertos están llenos de luminosidad y alegría, es totalmente navideño?, señaló el director.
Mariana Chabukiani -pianista y ahora cembalista de la orquesta- señaló que el cémbalo tiene sus dificultades técnicas y que se trata de un instrumento muy frágil ya que posee un mecanismo de cuerdas que se rompen fácilmente, además siempre hay que estarlo afinando. Fue capacitada por el mexicano Juan Luis García, ya que requiere una técnica distinta a la del piano para tocarlo.
Con la adquisición del clavicémbalo (cémbalo), la orquesta podrá ofrecer al público obras para este instrumento completamente barroco con el sonido más cercano a lo que fue en su tiempo, lo que dará una riqueza especial a los conciertos de este tipo.
Antes de finalizar la entrevista, Ramón Shade señaló que la orquesta ?necesita urgentemente percusiones, la parte de timbales también, pero poco a poco...?, además agregó que el 2004 fue un año excelente para la Camerata ya que realizaron múltiples giras por el norte y sur del país, fueron invitados a presentarse en el Palacio de Bellas Artes, visitaron Estados Unidos, hicieron ópera y se cambiaron al Teatro Nazas, su nuevo hogar.
?Ya tenemos el plan de trabajo del año que entra, pero ese se los haremos saber después?, también negó que exista el talento suficiente para hacer viajes costosos al extranjero en busca de músicos, como lo dijo un medio de comunicación, asegurando que los músicos que vienen a probarse a la Camerata se pagan su propio boleto de avión y vienen con el riesgo de no ser aceptados.
Será el 14 de enero de 2005 cuando la orquesta ofrecerá su primer concierto del año, mismo para el que ya tienen preparadas muchas actividades.
Programa
A diferencia de otras obras de Bach, las que esta noche ejecutará la Camerata no son trágicas, sino festivas en su totalidad.
JOHANN SEBASTIÁN BACH
Suite Orquestal No.2 en Si menor BWV 1065.
I.- Ouverture.
II.- Rondeau.
III.- Sarabande.
IV.- Bourreé I y II.
V.- Polonaise.
VI.- Menuet.
VII.- Badinerie.
Flauta: Juan Manuel Rosales.
Concierto para Violín y Oboe en re menor BWV 1060 R.
I.- Allegro.
II.- Adagio.
III.- Allegro.
Violín: Marina Gorbenko.
Oboe: Josef Gamilagdishvili.
INTERMEDIO
Concierto de Brandenburgo No.5 en Re Mayor BWV 1050.
I.- Allegro.
II.- Afectuoso.
III.- Allegro.
Flauta: Juan Manuel Rosales.
Violín: Sebastian Kwapisz.
Cembalo: Mariana Chabukiani.
Director: Ramón Shade.
Nota relacionada (FOTO CLAVICÉMBALO)
El clavicémbalo se une a la Camerata
Es tan delicado, que ni la publirelacionista de la orquesta se le quería acercar; y es que con cualquier movimiento se desafina o corre el riesgo que se le reviente una cuerda...
El concertino Sebastián Kwapisz relaciona el sonido del clavicémbalo con el de una guitarra, con la diferencia que sus cuerdas se tocan por medio de una tecla.
Se trata de un instrumento musical de punteo de cuerdas popular durante el barroco. Fue el instrumento doméstico desde comienzos del siglo XVI hasta fines del siglo XVIII. Desde sus inicios no sólo fue solista sino que también ha sido una parte esencial en la música de cámara, música orquestal y en la ópera.
El clavicémbalo que ahora le pertenece a la Camerata de Coahuila llegó a la ciudad hace tres semanas, tuvo un costo de cien mil pesos y fui construido en la Ciudad de México por Juan Luis García.
Entre los primeros constructores del clavicémbalo está la familia Ruckers en Flandes, cuyos comienzos fueron en 1579. La construcción de estos instrumentos de fines del siglo XIX y principios del XX fue en parte gracias a la pianista y clavicembalista Wanda Landowska, quien fue la primera profesora del instrumento en tiempos modernos, y no solo interpretó antiguas obras escritas, sino que también encargó obras nuevas a diferentes autores, entre ellos a Manuel de Falla.