CAPITULO 9
Desde que Castaño de Sosa abandonó Nuevo Almadén el 15 de junio de 1590, con toda su gente, para dirigirse hacia el norte a la conquista de Nuevo México, quedo enteramente abandonado el territorio coahuilense. Ni fundaciones, ni exploraciones a excepción de la del capitán Urdiñola en 1607, de la trágica entrada de Fray de Altamira, asesinado por los indios de Nadadores y de los intentos de don Martín de Zavala de agregar el Nuevo Almadén a Nuevo León, de donde llegaron algunos estafadores que con engaños trataron de vender minas inexistentes y propiedades a incautos de esa provincia. En todo ese tiempo se mantuvo despoblada esta región.
Se recuerda que se puso como alcalde mayor al capitán Diego de Villarreal en 1644, para continuar la controversia entre Nuevo León y Nueva Vizcaya sobre esta región, controversia que duró muchos años.