Agencias
Los Ángeles, EU.- Aunque la trayectoria artística que tiene es relativamente corta, Colin Farrell ya se ha convertido en uno de los actores mejor cotizados de Hollywood. Como respaldo a tal afirmación pueden mencionarse Phone Booth, American Outlaws, The Recruit, S.W.A.T. y algunos otros filmes en los que fue visto recientemente.
Esta semana Farrell será visto por sus admiradores en Alexander, donde tuvo la responsabilidad de encarnar al conquistador griego más grande y famoso que se ha dado en la historia. Invitado por el escritor y director Oliver Stone ha participar en tan ambicioso proyecto, Farrell dijo en una entrevista que ?nunca había pasado una temporada tan excitante como esa en toda su vida?.
Aunque conocía sólo de nombre a Stone, a quien se refirió utilizando la palabra maestro, Farrell asegura que antes de entrevistarse por primera vez con él fue a una tienda de videos a rentar algunas de sus películas. Después de verlas llegó a la conclusión de que Alexander sería la primera gran oportunidad que Hollywood le ofrecía para demostrar su calidad como actor.
?Es cierto que estoy relativamente satisfecho con los filmes que hice antes y con la atención que mis películas han recibido en Estados Unidos, pero deseaba participar en un proyecto que fuera bien poderoso y muy especial, desde el punto de vista cinematográfico?, explicó Farrell. ?Cuando vine por primera vez a trabajar en este país tenía ese propósito. Y aunque me vi en la necesidad de esperar algunos años a que apareciera esa oportunidad creo, en todo caso, que la participación que tuve en Alexander justifica cualquier sacrificio?.
Originario de la ciudad de Dublín, Irlanda, Farrell atrajo la atención del público y los productores estadounidenses con el papel que hizo en la cinta Tigerland, dirigida por Joel Schumacher. A partir de ese filme su carrera comenzó a recibir el impulso que lo ha llevado, en una veloz y ascendente trayectoria, al sitio que ahora ocupa entre los mejores actores a nivel internacional.
?No soy una persona supersticiosa, pero sí creo en la buena suerte?, aseguró Farrell sonriente. ?Pienso que si yo no tuviera buena suerte no estaría sentado aquí, en esta entrevista, hablando sobre las experiencias que me dejó interpretar el papel de Alejandro, en un filme escrito y dirigido por Oliver Stone. Cuando veo en retrospectiva todo lo que ha ocurrido en mi carrera, siempre llego a la conclusión de que soy una persona muy afortunada. Entonces le agradezco a Dios todo lo que ha hecho por mí, desde el primer momento que decidí volverme actor?.
Formado inicialmente dentro del teatro irlandés, ámbito donde recibió sus primeras aclamaciones y reconocimientos profesionales, Farrell tuvo que someterse a un duro programa de entrenamiento físico antes de comenzar la filmación de Alexander. Todo eso, junto con las lecturas que llevó a cabo acerca de la vida de Alejandro Magno, le ayudó a entender mejor qué tan portentosas e increíbles fueron las hazañas llevadas a cabo en Europa, Asia y el Medio Oriente por tan legendario conquistador de Macedonia.
?Alejandro no era un individuo común y corriente sino, todo lo contrario, un personaje visionario y un guerrero extremadamente inteligente?, señaló Farrell. ?No hubo nada que pudiera interponerse entre él y sus deseos por poner bajo su mando a otros imperios. Al mismo tiempo que yo aprendí a manejar las espadas y montar a caballo, fui recibiendo algunas importantes lecciones de historia y cultura por parte de Oliver Stone. Gracias a la pasión y el entusiasmo con los que él me describió la personalidad de Alejandro entendí, en poco tiempo, la grandeza que había detrás de sus afanes por unificar al mundo antiguo en uno solo?.
Según Farrell, aunque se le consideraba un guerrero implacable en los campos de batalla, la conducta de Alejandro estaba movida, en realidad, por un fuerte idealismo.
?Lo que deseaba era construir una grande e inmensa nación como tributo a sus dioses. Conocer de primera mano semejantes deseos me dio una nueva perspectiva acerca de mí mismo y la realidad en la que había vivido antes?.
?Creo que después de protagonizar una cinta del tamaño de Alexander entiendo mejor la voluntad que tienen ciertos seres humanos para realizar grandes hazañas y eventos trascendentales. Y la verdad es que yo quisiera ser reconocido, dentro de mi trabajo artístico, como uno de ellos. A lo mejor todavía me falta mucho tiempo para alcanzar ese nivel, sin embargo, creo que tarde o temprano estaré ahí?.