París, (EFE).- El museo parisino del Louvre ha comprado un collar y unos pendientes de esmeraldas que forman parte del prestigioso conjunto de joyas que Napoleón le regaló a la emperatriz María Luisa con motivo de su boda en 1810.
La compra -que ha sido a un coleccionista privado y ha costado 3,7 millones de euros- se ha realizado gracias a la colaboración de la Sociedad de Amigos del Louvre, los Fondos de Patrimonio y los fondos propios del museo, indicó la dirección del Louvre.
El conjunto de joyas para el enlace, creación de Francois-Jospeh Nitot, el joyero del emperador, incluía además una diadema que se conserva en Washington (Estados Unidos).
Las joyas, que María Luisa llevaba a su salida de Francia en 1814, pasaron a uno de sus primos, el gran duque Leopoldo II de Toscana y se mantuvieron en manos de la casa de los Ausburgo hasta 1953, cuando se dispersaron.
El collar, compuesto por 32 esmeraldas, 874 brillantes y 264 diamantes, y los pendientes, con dos grandes esmeraldas y 48 diamantes rosas, se encuentran en excelente estado, según el Louvre.
Estas piezas, junto a otras importantes joyas históricas, serán exhibidas en la galería de Apolo del museo, que reabrirá sus puertas en noviembre próximo tras una intensa restauración.