AP
JERUSALÉN.- El primer ministro israelí, Ariel Sharon, está dispuesto a dialogar sobre formas de lograr un Oriente Medio libre de armas nucleares pero únicamente en el marco de un proceso de paz más amplio, dijo ayer el jefe del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Sin embargo, Mohamed ElBaradei, que concluyó una visita de tres días a Israel, no logró avances en los intentos de que el Estado judío revele sus propias capacidades nucleares.
“El primer ministro me dijo que la política israelí sigue siendo que en el contexto de paz en el Oriente Medio, Israel verá con agrado la creación de una zona libre de armas nucleares en el Oriente Medio”, declaró ElBaradei tras reunirse ayer con Sharon.
Funcionarios israelíes enfatizaron que esas conversaciones sobre control de armas están todavía lejos de concretarse, ya que Sharon subordinó esos diálogos al avance del “Mapa de Ruta”, un plan de paz entre israelíes y palestinos auspiciado internacionalmente que permanece estancado desde hace un año.
De todas formas, ElBaradei dijo haber quedado complacido por los comentarios de Sharon.
“Es la primera vez que escucho decir eso al primer ministro de Israel”, dijo ElBaradei a los periodistas en Jerusalén. “No se trata de una nueva política, pero la afirmación de esa política a nivel del primer ministro es un acontecimiento bien recibido”, agregó el funcionario.
ElBaradei viajó a Israel para persuadir al Estado judío de que abandone su tradicional política de “ambigüedad nuclear”, mediante la cual no confirma ni niega que tenga armamento atómico. Se cree que Israel es el único país del Oriente Medio que dispone de misiles nucleares listos para ser lanzados.
ElBaradei esperaba por lo menos un reconocimiento tácito de que Israel dispone dichas armas o de los medios para fabricarlas.
Sin embargo, Israel no modificó su política, pues considera que es la mejor forma de evitar que sus enemigos le ataquen a la vez que les priva de la justificación para construir sus propias armas nucleares.
“Israel no tiene motivos para cambiar una política que le ha funcionado bien”, dijo un alto funcionario israelí bajo la condición del anonimato.