Sin quieren que deje de contaminar, manténganme, dice fabricante de tabiques
Los ladrilleros de la colonia José Ángel Leal están conscientes que provocan contaminación de humos y molestias a los vecinos de las colonias y fraccionamientos aledaños, pero no tienen otra opción porque esta actividad es su único sustento.
?¡Que me den de comer y ya no les echo más humareda!?, expresó Manuel Rueda Pérez, quien trabaja en la calle Obradores No. 108, al ser entrevistado sobre las quejas de contaminación.
A lo largo de esta citada calle, que cruza casi toda la colonia José Ángel Leal, de la Jesús García hasta el libramiento San Ignacio, hay unos 20 obradores.
En un recorrido realizado ayer al mediodía no había quemas visibles. Algunos jóvenes y niños ayudaban a cargar los obradores con ladrillo seco, y otros estaban dedicados a la fabricación en molde.
Unos tres obradores más adelante, otro trabajador, Hilario Palma Rodríguez, dice: ?Sí, sí estamos conscientes que contaminamos?, pero señala que utilizan quemadores ecológicos que trabajan con polvo de aserrín, y que no echan tanto humo como los de aceite quemado.
Detalla que lo más fuerte del humo se produce como en todo, al inicio de la ?quema? de ladrillos, después que se calienta la parte de abajo del obrador, ya no es tanto. Ambos dudan que los quemadores de aserrín o madera sean realmente ecológicos, porque produce contaminación, uno más que otro.
Ambos reconocen que en ocasiones o en la parte final, utilizan basura de leña, menos basura doméstica. Tampoco utilizan llantas, porque no los deja la autoridad municipal, ni algún otro material que produzca más contaminación.
Manuel Rueda Pérez explica que ninguna autoridad del Municipio les ha hablado de una posible reubicación. Ante la posibilidad de que se lo pidan, acepta pero a condición de que lo indemnicen.
Señala que su actividad apenas le da para ?sacar la tortilla?, porque no hay compradores. Ahorita el millar de ladrillo lo vende a 850 pesos; dice que realiza una quema (con ocho mil ladrillos) cada 22 días, pero que son muchos los gastos. Por ejemplo, indica, para hacer cuatro mil ladrillos se necesitan dos viajes de tierra, y cada uno cuesta 380 pesos; para dos quemas requieren de cinco viajes de polvo de aserrín que se consigue en una fábrica forestal de La Tinaja, a como quieren, a 500 ó 600 pesos.
Hilario Palma Rodríguez, por su parte, también asienta que están en crisis, y más en tiempos de lluvia que ya se aproxima. Sobre su reubicación, indica, que ya fue al poblado Pino Suárez. ?Ya fui allá, y la verdad ¡bendito Dios, que les vaya bien!?, expresa.
Para él irse hasta allá no es conveniente, además, dijo estar decepcionado del Municipio porque promete y después no cumple. Recordó que entre las promesas no cumplidas se encuentra el apoyo para conseguir el polvo de aserrín cuando los dotaron de los quemadores ecológicos, y ahora lo consigue hasta en 600 pesos el viaje, o a como se los dejen.
Su quemador está en el 402 de la calle Obradores y 5 de Mayo, y desde aquí también señala que sí echa humo cada vez que quema, el cual puede durar entre diez y 14 horas, pero igual, dijo que es su único sustento.
En el Parque Industrial Ladrillero del poblado Pino Suárez reubicarán 169 obradores que se localizaban en las orillas del Arroyo Seco de esta ciudad.
En varios recorridos, las autoridades municipales han verificado el avance de la construcción de las ladrilleras ecológicas y de la planta de tratamiento de aguas residuales que será la segunda prefabricada en el estado, y es la que dará abastecimiento a este parque industrial.
De acuerdo a información de la Presidencia Municipal hay un avance considerable en la edificación de los obradores y en la construcción de la planta tratadora que quedará ubicada en el poblado 15 de Septiembre.
El Municipio espera que con el Programa Estratégico de Reconversión de Ladrilleras se solucionen, en parte, los problemas de contaminación por humos que padece la ciudad, debido a que el funcionamiento de los obradores conlleva un daño ecológico.
Numeralia
20 obradores en la colonia José Ángel Leal
