17 de enero de 2004.
Pekín, (EFE).- El Ministerio chino de Salud confirmó hoy oficialmente como casos de Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SARS, por sus siglas en inglés) a los dos pacientes ingresados en un hospital de Cantón hace dos semanas, una camarera de 20 años y un hombre de negocios de 35.
Al mismo tiempo, las autoridades sanitarias informaron del alta médica de la paciente más joven, siguiendo la misma estrategia que con el primer enfermo de SARA en seis meses, que fue confirmado como caso oficial pocos días antes de darle el alta.
Ambos pacientes fueron identificados como "enfermos con síntomas de SARS" por el Ministerio de Salud el 8 y 13 de enero respectivamente, varios días después de que lo hiciera el Centro de Control de Enfermedades Infecciosas de Cantón (CCEI), que se basa exclusivamente en el diagnóstico clínico en sus comunicados.
Por otra parte, tanto el Ministerio como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han negado los rumores sobre un posible cuarto caso de neumonía atípica, el de un hombre de 38 años que trabajaba en un mercado de carne y verduras de Shenzhen desinfectado la semana pasada.
La OMS informó ayer, viernes, de que la reaparición de la enfermedad en la provincia meridional de Cantón era una variante benigna de la epidemia de 2003, por lo que descartó una situación de alerta sanitaria como la que se produjo el año pasado, que afectó a 5.327 personas en toda China, de las que 350 fallecieron.
El hecho de que la OMS reconociera la existencia del primer caso de neumonía de este invierno horas después de que lo hiciera el Ministerio de Salud, pone de manifiesto que ambas organizaciones son partidarias de la prudencia a la hora de emitir sus diagnósticos.
Pero también pone en entredicho la transparencia informativa anunciada por las autoridades sanitarias que investigan el SARS, un hecho que se suma a la destitución, el pasado 9 de enero, del jefe de Propaganda de Cantón después de que un diario local publicara la noticia del primer caso al mismo tiempo que el CCEI.
Ayer mismo la OMS confirmaba que la civeta -un mamífero similar al tejón y considerado una exquisitez gastronómica en el sur de China- es portadora del virus que causa la neumonía atípica.
"Hemos detectado rastros del coronavirus en todas las jaulas en las que se guardaban ejemplares de civeta en el restaurante donde trabajaba la camarera de 20 años enferma", afirmó Robert Breiman, jefe del equipo de la OMS desplazado a Cantón para investigar los nuevos casos.
Breiman añadió que la civeta no era necesariamente la fuente de la enfermedad, sino una más de las 100 especies en las que se ha detectado síntomas del SARS en Cantón, donde se originó la epidemia el 16 de noviembre de 2002.
Las autoridades chinas sacrificaron cerca de 4.000 civetas en los últimos días, además de prohibir la importación de aves procedentes de Vietnam, Corea del Sur y Japón para evitar la "gripe aviar", que hasta el momento se ha cobrado la vida de doce personas en Vietnam y podría ser más peligrosa que el SARS, según los expertos.
La camarera de 20 años dada hoy de alta es el segundo caso oficial de SARS desde que se dio por controlada la epidemia en China en junio de 2003, y estaba ingresada desde principios de enero en el Hospital Provincial Número 8 de Cantón capital provincial, donde aún permanece el tercer enfermo.
El primer caso de SARS este invierno fue el de un periodista de 32 años hospitalizado el pasado 26 de diciembre y dado de alta el 2 de enero, apenas una semana después de que se hiciera público su caso en el diario local "Southern Metropolis News", cuyo director fue interrogado el 7 de enero durante ocho horas por la policía.
Según un portavoz del Ministerio de Salud, el enfermo de 35 años -un hombre de negocios de una empresa privada- se encuentra en condiciones estables, en los últimos once días su temperatura ha sido normal y ninguna de las 50 personas que estuvieron en contacto con él han mostrado síntomas de SARS.
El resto de personas que estaban en cuarentena por haber tenido algún tipo de contacto con la paciente dada hoy de alta tampoco mostraron síntomas de padecer la enfermedad, por lo que las autoridades han decidido finalizar la observación médica.
A pesar de los esfuerzos de científicos de todo el mundo, la OMS aún no ha dado el visto bueno a ninguna vacuna efectiva contra el SARS, un virus mortal que afectó a 8.098 personas en todo el mundo en 2003, de las que 774 fallecieron, y paralizó la vida y la economía chinas.
