Los tripulantes podrán ser liberados si se demuestra que su presencia en la zona era un error y no intencionada.
21 de junio 2004.
Teherán, (EFE).- Irán capturó tres patrulleras británicas en el Golfo Pérsico, acción que la agencia oficial IRNA vinculó con las acusaciones de Londres y otras capitales a Teherán por el desarrollo del programa nuclear iraní.
Las patrulleras fueron capturadas en el Golfo Pérsico y ocho de sus tripulantes detenidos, después de que hubieran penetrado ilegalmente en las aguas territoriales iraníes del Golfo Pérsico, según declaraciones del portavoz del ministerio de Exteriores, Hamid Reza Asefi.
"Los guardacostas iraníes, actuando de acuerdo con su obligación legal, capturaron los barcos y detuvieron a sus ocupantes. En este momento los individuos están siendo interrogados y hay una investigación en marcha para esclarecer el asunto", dijo Asefi, citado por IRNA.
El portavoz añadió que podrían ser pronto liberados si se demuestra que su presencia en la zona era un error y no intencionada.
Fuentes navales iraníes citadas por el canal "Al Alam" añadieron que se habían encontrado "armas y mapas" dentro de las embarcaciones.
Desde Londres, el Ministerio de Defensa aclaró que las tres embarcaciones de la Marina Real retenidas en Irán por las autoridades de ese país "no son barcos de guerra", como habían afirmado en un principio medios estatales iraníes.
Mientras el Ministerio de Defensa británico ha anunciado que investiga el incidente, el de Asuntos Exteriores informó de que su embajador en Teherán se ha puesto en contacto con las autoridades iraníes para tratar de llegar a una solución al problema.
La zona del sur de Irak está bajo control militar británico, incluido el puerto de Um Qasr y las aguas territoriales circundantes.
Las embarcaciones británicas en la zona se dedican oficialmente a vigilar esa región para garantizar la seguridad, impedir el contrabando y participar en la instrucción de las nuevas fuerzas iraquíes.
Las costas del Golfo Pérsico donde confluyen Irak, Irán y Kuwait nunca han estado claramente delimitadas, y de hecho este asunto sirvió de pretexto al ex presidente Sadam Husein iraquí para lanzar la guerra contra Irán en 1980.
La agencia IRNA explicó que este apresamiento se produce "después de que Gran Bretaña se una a otros miembros clave de la ONU en las acusaciones a Teherán de no ofrecer cooperación plena con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA)".
IRNA se refiere al apoyo británico a una resolución del Consejo de Gobernadores del OIEA del pasado 18 de abril en Viena, que criticaba la escasa cooperación del Gobierno iraní en las inspecciones de los expertos del organismo.
Las autoridades de Teherán consideran que el Reino Unido, junto con otros países europeos -y en concreto Alemania, Francia y Rusia- están presionando dentro del OIEA para endurecer la postura respecto al programa nuclear iraní, con lo que de hecho se alinean con las presiones de Washington.
El Gobierno iraní sostiene que su programa nuclear tiene exclusivamente fines pacíficos, pero EEUU y varios países europeos sospechan que Teherán busca en realidad desarrollar un programa armamentístico.
Las relaciones entre Teherán y los países europeos se han agriado en las últimas semanas y hoy el Ejecutivo iraní reaccionó airadamente a las declaraciones de la presidencia irlandesa de la Unión Europea en la que se criticaba a Irán por la situación de los derechos humanos.
La presidencia irlandesa había calificado de "poco realistas" las últimas conversaciones sobre derechos humanos mantenidas por funcionarios europeos con iraníes, dada la persistencia de los atropellos y violaciones en la República Islámica.
"La declaración de la UE muestra su incapacidad para aceptar el diálogo transparente", señaló hoy Reza Asefi, quien acusó a los Estados de la UE de "desatender los derechos de las minorías, la discriminación contra los musulmanes, la islamofobia y la falta de respeto por los derechos de los refugiados en la UE".
"Durante las conversaciones, se criticó la falta de atención de la UE a las repetidas violaciones en la Palestina ocupada y en Irak, y se expresó una gran preocupación por las negligencias de Occidente y la politización del asunto de los derechos humanos", dijo hoy el portavoz de Exteriores.
