Hace Profeco recomendaciones para evitar que la comida se descomponga y se desperdicie.
EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Para que los alimentos duren por más tiempo y así cuidar la economía familiar, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) hace una serie de sencillas recomendaciones que las personas pueden seguir en la cocina.
De poco en poco se puede perder mucho, por lo que, en estos tiempos de crisis económica, se debe tratar de sacar el mayor provecho a los alimentos de uso frecuente. Por ejemplo, para que no se desperdicie el aceite de cocina, es preferible dejar el sello de la tapa y, con un tenedor o cuchillo, hacer orificios encima, pues así se obtendrán pequeñas cantidades y sólo se utilizará el aceite necesario.
Los alimentos congelados se deben deshielar en el refrigerador, el microondas o con el paquete envuelto en agua fría, pero nunca dejarse sobre superficies a temperatura ambiente porque, en estas condiciones, las bacterias se reproducen rápidamente.
Si se trata de carne, hay que retirar la charola de unicel con la que se comercializa en el supermercado y colocar el producto en un recipiente con tapa, guardarla en la parte más fría del refrigerador. No se debe almacenar por más de tres días y hay que desechar los líquidos que vaya soltando.
Para verificar la frescura del huevo que se tiene guardado, se debe agregar a un vaso con agua una cucharadita de sal, disolver bien y colocar el huevo. Si se va al fondo, está fresco, pero si flota debe desecharse.
Los sobrantes de frutas que se cortaron o pelaron pueden ser utilizados para hacer agua fresca o como refrigerio para la familia, si se les rocía jugo de limón y se colocan en el refrigerador, pues así se evita que se oscurezca la pulpa.
En el caso del betabel, sus hojas, bien lavadas y desinfectadas, también pueden aprovecharse en ensaladas, combinadas con lechugas, berros o espinacas y se pueden conservar frescas y crujientes si se cubren con una servilleta de tela húmeda hasta el momento de servirse.
Si la coliflor se coloca con el tallo hacia arriba en una bolsa de plástico cerrada con agujeros puede durar hasta seis días en refrigeración sin oscurecerse.
Para evitar un gasto extra en cuanto a recipientes, es posible reutilizar los envases de yogurt y mantequilla y en ellos guardar y congelar sobrantes de comida. También como moldes de gelatina o flan.
Cuando se almacenan paquetes de harina, arroz, frijol o alguna otra semilla, es importante colocar cerca de ellos hojas de laurel, así los gorgojos se mantendrán alejados. Si sólo se utiliza una parte del producto, es recomendable cerrar la bolsa con una liga o vaciarlo a un recipiente con tapa y poner adentro una hoja de laurel.
CONSEJOS
Éstos son algunos consejos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para que los ciudadanos saquen el máximo provecho a los alimentos más comunes.
-Con cualquier sobrante de alimentos que haya quedado en el refrigerador se puede hacer más alimenticia y rica una sopa.
-Para que los champiñones no se ennegrezcan, se puede retirar la base del tronco y bañarlos con jugo de limón antes de cocinarlos.
-Al rebanar los tomates, procurar que el “ombligo” esté hacia arriba, así las rodajas conservarán su forma y retendrán el jugo.
-Si se sumergen las naranjas por 15 minutos en agua caliente, se obtiene más jugo. También se puede rodarlas sobre la mesa oprimiéndolas con la mano.
-Para revivir una lechuga marchita, hay que sumergirla rápidamente en agua caliente y luego enjugarla en agua helada con un poco de sal o azúcar, sacudirla y refrigerarla durante una hora.
-En caso de que las galletas se hagan duras, se pueden guardar en una caja con tapa a presión junto con un pedazo de pan fresco o un trozo de manzana fresca.
FUENTE: Profeco