Pese a la amenaza de la excomunión hay quien utilizará la píldora de emergencia
Como ingenua, injusta e inequitativa fue calificada la opinión de la Iglesia en cuanto al uso de la píldora de emergencia o del ?día después?, al amenazar con la excomunión de sus feligreses y direccionada a la mujer que la utilice, por considerarla abortiva, después de que las autoridades de salud han explicado que la función de este medicamento se introduce antes de la fecundación y que incluso en un momento dado en que la mujer tenga embarazo, éste no puede ser afectado.
Ayer El Siglo de Durango comprobó que una de cada seis mujeres manifiesta que es correcta la actuación de la Iglesia, mientras que las otras cinco indicaron que a pesar de la amenaza de la Iglesia usarían la píldora, ya que consideraron que es una decisión personal y buena para planificar la familia, mucho más cuando existe una precaria economía en el país para sostener una familia numerosa. Muchos hijos pueden significar más pobreza, menos alcance económico y hasta violencia intrafamiliar, según la mayoría.
Gisela Díaz Lagos Quiroga, de 22 años, estudiante de la Facultad de Contaduría, calificó como tonta la idea de que un sacerdote se dé cuenta de que una mujer utiliza la píldora; ?es una medida extremosa de la Iglesia?, dijo. También comentó que las mujeres son independientes y que es una decisión personal y que una vez que contraiga matrimonio usará los anticonceptivos necesarios para planificar su familia.
También Cristina Ontiveros Rangel, de 18 años de edad, estudiante de la Facultad de Derecho, se extrañó de la actitud de la Iglesia, ya que la píldora de emergencia, de la que han explicado las autoridades de salud que no es abortiva, es para que haya planificación familiar y para no engendrar niños que puedan ser víctimas de la violencia intrafamiliar y de la pobreza; ?no sé porqué la Iglesia no ve estos problemas sociales?, se preguntó, y aclaró que el clero es muy cerrado.
Norma Rodríguez Jiménez, de 23 años, madre de dos hijos, explicó que ella sí utilizaría la pastilla de emergencia en un momento dado, ya que consideró que es importante planear los hijos que se quieren. Dijo que por ejemplo en estos momentos otro niño no lo desearía, ya que no tiene los recursos económicos para sostenerlo.
Mayela Jiménez de 28 años de edad, madre de un hijo, aseveró que ?la Iglesia está mal?, pues estimó que la pastilla de emergencia no es abortiva y que esta institución católica está desinformada. Mayela manifestó que sí usaría la píldora, ya que es importante planear la familia para vivir mejor; ?¿para qué tener tanto hijo si no se tienen los recursos??, explicó.
Por su parte, Adriana Martínez Rosales, de 36 años, también madre de dos hijos, subrayó que la Iglesia siempre ha estado en contra de los métodos anticonceptivos, ?pues para ellos sólo funciona el natural o el ?Billings?? y opinó que no se pueden llenarse de hijos; ?yo soy católica, pero hay que planificar la familia y esta institución religiosa debería dar mayor amplitud de acceso a estos métodos?, finalizó.
Por último, Carmen González Arce, de 41 años de edad, fue la única mujer entrevistada que opinó que debe respetarse la opinión de la Iglesia. Ella es casada, tiene dos hijos y dijo no utilizar anticonceptivos, ya que la llegada de otro no le ocasionaría ningún problema.
FERTILIDAD
Impulsan ?Método Billings?
La Iglesia Católica promueve el ?Método Billings?, con el que no se requieren anticonceptivos, sino que se utilizan los periodos de fertilidad e infertilidad de la mujer para conocer los días exactos en que puede quedar embarazada.
Durante los días que llevan a la ovulación, el moco cervical sale de la vagina cuando la mujer se encuentra de pie y se mueve. El moco se observa en la vulva y la mujer y debe llevar registros en una tabla, para conocer los días en que puede sostener relaciones sexuales y evitar el embarazo, mientras que, por el caso contrario, puede conocer qué días le ocasionarían un estado de gravidez. La Iglesia asegura que a través de este método como puede conseguirse un embarazo de un varón o bien de una mujer.
