INVIERNO | SUGIEREN DAR UNA “SEGUNDA OPORTUNIDAD” A LAS PRENDAS
EL SIGLO DE TORREÓN
Hay que ser cautelosos con los descuentos en las tiendas
TORREÓN, COAH.- En la mayoría de los closets se guarda ropa que hace mucho se dejó de usar, pero que no se desea tirar porque está nueva o tiene zonas deterioradas, que en general está bien.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) recomienda dar una “segunda oportunidad” a esta ropa con un poco de imaginación y mucho entusiasmo. En el caso de la de invierno, podría intercambiarse entre la familia, donde los niños de la misma edad y tallas similares pueden usar las prendas que dejaron los primos mayores.
Muchas veces se pueden reutilizar, pero es necesario retocarlas. Si fuera el caso, quizá es necesario comprar más estambre para añadir un pedazo a las mangas o a lo largo del suéter o la chamarra.
Si se trata de ropa de lana o pana, será necesario adquirir telas de la misma textura e inclusive en muchas de estas tiendas venden retales a precios muy económicos. Como quizá el estampado y el color no será el mismo, se pueden hacer combinaciones especiales. El caso es aprovechar al máximo lo que se tiene en casa para contribuir al ahorro familiar.
En casi todos los establecimientos de telas tienen una sección de retazos. Es importante aprovechar las rebajas de fin de temporada (comprar a fin de invierno lo que se utilizará el otoño e invierno siguiente).
Y para reciclar y ahorrar, hay que hacer caso de la frase, “el que busca, encuentra”, es decir guardar y clasificar de ser posible: botones, gomas elásticas, cierres automáticos y lazos de prendas que ya no tienen remedio alguno.
Cómo hacerle
Reducir al mínimo las compras superfluas es una de las recomendaciones que pueden ayudar en este invierno. Los gastos en pantalones de pana, calzado y artículos para pasar el crudo invierno, se añaden a los desembolsos habituales para llenar el refrigerador y a las facturas derivadas del consumo doméstico.
Para que las cuentas cuadren, sobre todo si no se dispone de unos ahorros, es recomendable elaborar un presupuesto, es decir, contabilizar los ingresos y descontar los pagos fijos, así como prever los gastos probables. De este modo se podrá saber con certeza con cuánto dinero se dispone para las compras invernales.
La principal partida del presupuesto familiar en esta temporada se destina a la compra de ropa abrigadora, por eso conviene tener en cuenta los consejos que difunden entidades como la Profeco, quien dice que antes de hacer la compra es recomendable elaborar una lista previa para atenerse a lo estrictamente necesario.
El consumidor puede beneficiarse si compara precios en distintos establecimientos, ya que existen diferencias considerables: Las ofertas suponen un beneficio real para el consumidor si sabe aprovecharlas.
Ojo con las rebajas
No hay que dejarse deslumbrar por los carteles de precios bajos; el consumidor debe asegurarse previamente que lo que compra rebajado es de buena calidad y que no se trata de artículos que el establecimiento ha puesto a la venta exclusivamente para la temporada de rebajas o que tienen una calidad inferior.
Cada vez que se aproxima una campaña de rebajas, la Profeco recuerda a todos los potenciales compradores que tienen los mismos derechos que en cualquier otra época del año. Es decir, en caso de que el cliente pague sus compras con cualquier otra tarjeta de crédito, el establecimiento en cuestión tiene la obligación de admitirlas.
Las rebajas de invierno son el período del año en que el consumidor destina un mayor presupuesto a la compra textil. Durante el mes de enero, el gasto destinado fue de un 24% superior al promedio mensual del año.
Cuidar la ropa
Unas sencillas pautas de disposición e higiene conseguirán que la ropa dure más tiempo y se mantenga en buen estado. Sobre todo la de invierno que por la característica de sus telas, tiende a holgarse, llenarse de “bolitas” o hasta encogerse.
Para tener listas aquellas prendas que se llevan con más gusto y conservarlas sin problemas una temporada más, merece la pena prestar un poco de atención a las etiquetas de la ropa, que indican cuál es el método más adecuado para su limpieza y planchado. Pero, en general, para prendas que no exigen cuidados extremos en su manipulación, sólo hay que habituarse a seguir algunas recomendaciones tan sencillas como la de “separe la ropa blanca de la de color a la hora de meterla en la lavadora”. Tampoco es aconsejable mezclar las prendas delicadas con las que no lo son.
La ropa excesivamente sucia es mejor dejarla en remojo y frotarla antes de introducirla en la lavadora. También es aconsejable aplicar detergente o algún producto específico en cuellos y puños. Es mejor guardar las chaquetas o los vestidos de fiesta en bolsas, para que se conserven mejor hasta la próxima vez que vayan a usarse.
Airear de vez en cuando las prendas que llevan mucho tiempo en el armario es muy efectivo, sobre todo cuando se trata de abrigos, suéteres y cobijas.
CONSEJOS
Para aquellas madres que no hacen punto, o sí lo hacen, pero quieren unos zapatos abrigadores diferentes y baratos para sus niños, podrían hacer unos de tela. Se pueden aprovechar pequeños retazos sueltos de alguna prenda que se haya confeccionado o prendas estropeadas con alguna zona aprovechable.
Para hacer la plantilla de la suela, utilizar de guía un zapato que le esté bien al bebé. Dibujarla sobre un papel que servirá de patrón. Para cortar la parte superior del zapato no necesitáis nada, pues va a ser una pieza fruncida.
Se va cosiendo del revés la suela al trozo de tela que será la parte superior del zapatito. Al terminar de realiza la costura de detrás del mismo (talón).
A la parte superior se le hace un dobladillo, dentro del cual se introduce un cordón o una cinta, que servirán para atar el zapato. El cordón o la cinta salen al exterior mediante dos pequeños ojales a realizar en la parte delantera.
La parte superior y la suela pueden ser de la misma tela o de telas diferentes. Es interesante que sean de telas que abriguen, pues ésa es su finalidad.
FUENTE: Profeco