Chicago (EEUU), (EFE).- El consumo habitual del acetaminofén puede afectar las funciones de los riñones en determinadas personas, señala un estudio.
Científicos del hospital femenino de Boston (Massachusetts) que realizaron la investigación entre 1,700 mujeres durante once años, determinaron que un 30 por ciento experimentó un declive en las funciones renales a causa del prolongado consumo de acetaminofén, el componente del analgésico Tylenol.
Explicaron que Tylenol fue el único fármaco entre los de uso común contra el dolor y la fiebre que mostró un vínculo con problemas de riñones.
Gary Curhan, autor del estudio, dijo que su descubrimiento no debe motivar a la gente a dejar de consumir acetaminofén.
Indicó que la amplia mayoría de fármacos contra el dolor que usan las mujeres es segura para los riñones, lo cual está basado en las pruebas realizadas.
El estudio, publicado en el último número de la revista "The Archives of Internal Medicine", señala que los riesgos de efectos renales dañinos aumentan un 64 por ciento entre las mujeres que toman entre 1,500 y 9 mil tabletas durante gran parte de su vida.
Ese riesgo se duplica entre quienes consumen más de 9 mil tabletas de acetaminofén.
Curhan advirtió que los analgésicos son usados de forma común especialmente por las mujeres, y que un creciente número de pacientes toman esos fármacos para aliviar dolores crónicos o para prevenir enfermedades de corazón y derrames cerebrales.
La investigación sugiere que los médicos consideren terapias alternativas que ayuden a los pacientes a evitar la prolongada dependencia del acetamonifén mientras no se clarifiquen sus potenciales efectos secundarios.