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México, DF.- Legisladores de México, Chile y la República Checa anunciaron la conformación de una comisión especial encargada de vigilar el respeto a los derechos humanos en Cuba.
En rueda de prensa encabezada por el coordinador parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN), Francisco Barrio Terrazas, se anunció la creación de este grupo, que actúa al margen y con independencia de sus respectivos Gobiernos estatales.
“No va a detenernos el hecho de que la dictadura de Fidel Castro nos acuse de lo que quiera, por pronunciarnos en la defensa de los derechos humanos del pueblo de Cuba”, mencionó el diputado. En el Palacio Legislativo de San Lázaro, comentó que es “casi un hecho que se le va calificar (a esta comisión) como un esfuerzo anticastrista, pero las dictaduras siempre se comportan así”.
Para que se registrara el cambio en México de un sistema totalitario a un sistema en transición por la democracia, fueron de gran utilidad las condenas internacionales, explicó Barrio Terrazas. El coordinador del PAN en la Cámara de Diputados calificó como declaraciones hipócritas aquellas que aseguran no manejar una política injerencista en Cuba en favor de los derechos humanos.
“Para una dictadura, sea dictadura o dictablanda como la teníamos aquí, lo mejor es que nadie se meta y que se les dé libertad de cometer sus atropellos en contra de la población.” Cuando le preguntaron si esta comisión no interrumpe el reinicio de las relaciones diplomáticas entre México y Cuba, respondió: “Yo quiero insistir, las dictaduras se valen de cualquier pretexto, pero si esperamos que la dictadura esté de acuerdo, que se le señale este tipo de situaciones, podemos esperar sentados, podemos esperar por los siglos de los siglos.” Barrio agregó que las violaciones a los derechos humanos en la isla hay que decirlas, son atropellos a millones de personas que están en una situación de sufrimiento, “hay que decirlas, hay que estarlas señalando, le guste o no le guste a Castro”.
A su vez Ezequiel Silva Ortiz, diputado de la República de Chile, respaldó lo dicho por Barrio y destacó que, en su momento, la dictadura chilena de Augusto Pinochet también acusaba a quienes se le oponían de pretender inmiscuirse en sus asuntos.
“Nosotros queremos formar una posición latinoamericana equidistante de la posición de Estados Unidos, pero queremos que en Cuba se abrán espacios de libertad, que dejen respirar al pueblo cubano y pueda integrarse al resto de la comunidad internacional.”
El diputado sudamericano propuso abrir las embajadas a la disidencia cubana de los países que integran la comisión, para que auxilien a sus compatriotas que no comparten la ideología castrista.
También participó el diputado de la República Checa Petr Bradsky, quien se unió al reclamo de los integrantes de la comisión especial, a fin de que en Cuba se respeten los derechos humanos y sea el propio pueblo quien elija democráticamente a sus gobernantes.
