EFE
PEKÍN, CHINA.- Al menos 161 personas murieron por la explosión de un tren en la estación de la ciudad norcoreana de Ryongchon, confirmaron ayer, fuentes de la Federación Internacional de la Cruz Roja en Pekín.
“El número de víctimas mortales es de 161, pero no tenemos más información”, dijeron fuentes de la Cruz Roja en Pekín, que no supieron detallar si los fallecidos eran personas antes desaparecidas o enfermos que se encontraban hospitalizados.
La fuente no especificó si se han producido cambios en el balance provisional de heridos, que hasta ahora es de mil 300 y cinco desaparecidos. El aumento del número de víctimas coincidió con la llegada del primer envío de ayuda humanitaria de un Gobierno extranjero a Corea del Norte, a bordo de once camiones procedentes de China, informaron fuentes oficiales chinas.
Alimentos, dos mil alfombras, 300 tiendas de campaña y otros objetos de primera necesidad llegaron a la ciudad norcoreana de Sinuiju a bordo de once camiones, primera avanzadilla de un total de 1.2 millones de dólares de ayuda humanitaria prometida por China.
Este contingente fue la primera ayuda humanitaria de un Gobierno extranjero recibida por Corea del Norte, tras el accidente ocurrido el pasado jueves en Ryongchon, cuando un cortocircuito provocó un incendio en un tren cargado de nitrato de amonio, material altamente inflamable.
Expertos de Naciones Unidas y miembros de Organizaciones No Gubernamentales internacionales que trabajan en Corea del Norte estuvieron ayer de nuevo en el lugar de los hechos, según la Cruz Roja, cuyo personal se encuentra sin embargo en Pyongyang.
Al parecer, la situación sobre el terreno es “devastadora” y los efectos de la explosión pudieron sentirse en un radio de hasta cuatro kilómetros del lugar del suceso, que ha sido reconocido como “muy grave” por las autoridades norcoreanas.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) señaló que la zona sufre fuertes cortes de agua y electricidad, y agregó que las “necesidades básicas” han sido cubiertas gracias a las mantas y otros materiales de emergencia proporcionados por la Cruz Roja, y los alimentos distribuidos por la organización alemana “AgroAction” y el Programa Mundial de Alimentos.
China ha sido en los últimos años uno de los principales donantes de ayuda humanitaria a Corea del Norte, país con una grave crisis económica debido a las malas cosechas de la última década y al aislamiento internacional de su Gobierno estalinista.
También otros países, como Rusia y Alemania, así como la Unión Europea, han anunciado el envío de ayuda humanitaria.
El Gobierno japonés anunció ayer, que donará medicamentos por valor de 100 mil dólares a Corea del Norte tras el accidente ferroviario.
Enviará Seúl ayuda humanitaria
El Gobierno de Seúl solicitó ayer a Pyongyang la apertura de discusiones para estudiar la manera de hacer llegar su asistencia humanitaria a la ciudad norcoreana siniestrada.
Esta petición, que emana de una reunión ministerial con carácter de emergencia, se produce después de que el Ejecutivo surcoreano anunciara ayer la concesión al país vecino de una ayuda valorada en un millón de dólares.
El problema al que se enfrenta Seúl es la manera de trasladar todos los productos de primera necesidad y medicinas que incluye incluso el envío de un equipo médico que compondrían 25 personas.
Según fuentes del Ministerio de Unificación, si el envío por tierra es imposible por los problemas que supondría cruzar la frontera intercoreana, entonces se podría estudiar el transporte de la ayuda en barco.
La dificultad de este envío se explica por las delicadas relaciones que mantienen ambos países, en estado técnico de guerra tras el conflicto que los enfrentó entre 1950 y 1953, que sólo se interrumpió con un armisticio, sin un acuerdo de paz.
A primera hora de la mañana la Cruz Roja surcoreana comunicó que la primera partida de su ayuda humanitaria se llevará a cabo vía marítima mañana martes.
El barco transportará una ayuda valorada en 450 millones de wones (390 mil dólares), que incluirá 100 mil bolsas de fideos de rápida preparación, 12 mil botellas de agua mineral, tres mil mantas y tres mil prendas de vestir.
