24 de enero de 2004.
México, (EFE).- El presidente de México, Vicente Fox, defendió hoy las prácticas austeras en su Gobierno y criticó al alcalde de la Ciudad de México, Andrés Manuel López Obrador, por pagar un sueldo desorbitado a su director de Logística.
"Estamos siguiendo un plan de ahorros fuerte en el Gobierno Federal. No ha habido por tres años aumentos desde un nivel de dirección hasta el presidente de la República. No hemos aumentado los salarios ahí", señaló Fox.
Los comentarios afloraron después de que esta semana trascendiera que el alcalde de Ciudad de México, el izquierdista López Obrador, pagaba a Nicolás Mollinedo Bastar, un estrecho colaborador suyo, 62.000 pesos (unos 5.700 dólares) mensuales.
Mollinedo Bastar, dos de cuyos familiares también están empleados en la administración local, a veces recoge al alcalde en su casa, lo que hizo que muchos medios de comunicación asumieran que el es el chófer de López Obrador.
El caso saltó a las primeras planas de la prensa esta semana y motivó chistes y mofas al contrastar con el discurso de austeridad que emplea a menudo López Obrador.
Pero el asunto adquirió magnitud porque, además de tratarse del político más popular del país, el Congreso discutió el caso en una de sus sesiones más histriónicas, en la que legisladores que se oponen al alcalde siguieron hablando del "chófer" pese a que ya se aclaró que es un funcionario de alto nivel.
Fox recordó que entre 2000 y 2003 fueron reducidas 150.000 plazas en la Administración Federal, una medida que "tiene un significativo ahorro para los mexicanos".
"No pagamos sueldos altos ni a chóferes ni a nadie, en el Gobierno Federal. Pagamos los que nos aprueba el Congreso federal, uno por uno", señaló Fox durante una visita a Yucatán, en el Caribe mexicano.
Para el mandatario, la austeridad es uno de los seis ejes del Plan de Buen Gobierno que su administración se fijó al asumir su cargo a fines de 2000.
