Aunque el cese a partir del 23 de diciembre del 2003 a las importaciones de carne procedente de Estados Unidos, a causa del brote de las ?vacas locas? que se detectó en el vecino país, se vislumbra positivo para los productores locales, hasta la fecha no se ha traducido en beneficios tangibles para el sector que se dedica a la engorda de animales, e inclusive hay en contraste repercusiones negativas para la exportación de becerros en pie, al caerse los precios y con ello afectar la economía de los ganaderos duranguenses que se dedican a tal actividad.
El presidente de la Unión Ganadera Regional de Durango, Javier Hernández Carrasco, admitió que los productores locales de carne siempre señalaron la competencia desventajosa con la importación del 40 por ciento de la carne que se consume en la entidad, por lo que de alguna manera el cierre al ingreso del producto americano se consideró positivo.
Sin embargo, hasta la fecha, aún no hay beneficios tangibles para el sector, en virtud de que apenas está en proceso de consumo la carne importada antes del 23 de diciembre, y ello se refleja en un comportamiento normal en el sacrificio de animales en el frigorífico de la Unión Ganadera Regional.
Informó que en el 2003, en el rastro de la Unión Ganadera, se registró un sacrificio mensual de mil 439 bovinos y mil 375 cerdos, lo que representó en el caso del primero 17 mil 276 cabezas al año, y 16 mil 500 en el caso de los porcinos. Y en lo que va del 2004, el comportamiento ha sido similar, por lo que aún no hay implicaciones positivas del cierre a las importaciones, como se podría suponer que ello significaría.
Y en contraparte, los exportadores locales de becerros en pie a la Unión Americana han resultado perjudicados, ya que el precio del kilogramo cayó de 23 pesos el kilo, a 14 pesos, lo cual representa una pérdida de alrededor de 900 pesos por cada animal que llevan al mercado estadounidense.
Al 31 de diciembre, se había comercializado el 80 por ciento del total de cabezas autorizadas a exportar durante el periodo septiembre 2003 a agosto del 2004, que significan 63 mil 580. Sería en el 20 por ciento restante donde los ganaderos pudieran sufrir las pérdidas económicas por tales medidas que aplicaron sus similares de EUA para amortiguar los daños por la falta de mercados internacionales para su carne de bovino y cerdo.
El dirigente de los ganaderos explicó que uno de los sectores que posiblemente sí haya registrado beneficios con el cierre de las importaciones de carne son los tablajeros, ya que el precio por kilogramo se elevó de 65 a 85 pesos en promedio, en el caso de la tradicional, que es la pulpa; y en el caso del sacrificio de la vaca gorda de agostadero, subió a 11 pesos 25 centavos .
MEDIDAS
Visita de la Comisión Revisora Binacional
Por otro lado, el dirigente de la Unión Ganadera, Javier Hernández, informó que del 23 al 28 de febrero los integrantes del grupo revisor de la Comisión Binacional estarán en Durango para checar que se hayan cumplido todas las observaciones tendientes a evitar nuevos brotes de tuberculosis y brucelosis bovina en la entidad.
Dijo que el sector pecuario de Durango está preparado para cumplir con las observaciones impuestas por la Comisión Binacional, por lo que se tienen expectativas halagüeñas de que se habrá de aprobar la revisión que se realice en febrero, y con ello siga abierta la frontera estadounidense al ingreso de becerro en pie oriundo de Durango.
