Este mes, nunca ha sido serio.
De los 12 que tiene el año, en éste nada hay seguro.
Los más avezados meteorólogos fallan estrepitosamente.
Anuncian lluvias y aparecen días soleados.
Pronostican días llenos de sol y buen clima. Uno se confía, sale a la calle en mangas de camisa y de pronto aparecen los vientos fríos y hasta las heladas.
Y como éste es año bisiesto, en lugar de tener los 28 días agregaremos uno más.
Si pasó viento en popa diciembre y enero, no haga mucha confianza con este febrero. Arrópese bien, siga sin beber líquidos helados y cúbrase la cabeza por las noches si sale de paseo, para evitar lo dañe el sereno, y por las noches cubra también sus pies para evitar las enfriadas.
Febrero está bien loco, y dicen que marzo estará peor.
Porque el próximo mes tendremos ya las primeras visitas de las lluvias de esta región, o sea las famosas tolvaneras que han obligado a que en nuestras carreteras se coloquen avisos para pedirle a los conductores de vehículos tomar sus precauciones.
Febrero está deschavetado, pero qué bonito mes.
Tiene algo tan especial que ya se le considera, todo completito como el del amor y la amistad.
En un principio se escogió casi la mitad del mes, el día 14 para conmemorar a la amistad y al amor, pero era muy poco el tiempo destinado a estos sentimientos y se optó por los 28 o los 29 días completos.
Ayer fue por tanto el más importante de los días del mes, pero usted siga mostrando su afecto, sus buenos sentimientos a sus seres queridos.
En este mes de cambios climatológicos constantes, que sus sentimientos no varíen sino por el contrario que mejoren.
El mundo necesita mucho de la comprensión y el amor hoy que tantos problemas existen por todas partes.
Que este febrero, entre fríos, vientos, días soleados y demás, tenga usted mayor capacidad para entender y querer a los suyos.
Y cultive y fomente las verdaderas amistades, ésas que están con usted en las duras y en las maduras y no las flores de un día que se marchitan con la más leve brisa.