Se hablaba de temas ecológicos, y alguien le preguntó a Babalucas: "¿Qué opinas de la capa de ozono?". Contesta el badulaque: "Si el japonés se portó mal, estoy de acuerdo en que lo capen"... Himenia Camafría, madura señorita soltera, conoció en una fiesta a cierto médico joven y no feo. "Debería usted compadecerse de mí, doctor -le dice con un mohín de otoñal coquetería-. Sufro de sinusitis". Responde el facultativo: "No advierto en usted ninguno de los síntomas de la sinusitis". "Sí, doctor -insiste la señorita Himenia-. Soy célibe y doncella. Sin-usitis"... El cliente del restorán halló un insecto en su sopa. Llama al mesero y muy indignado le señala el plato. "¿Qué es eso?" -le pregunta. El individuo se asoma al plato y luego dice: "Le ruego al señor que me disculpe. Soy mesero, no entomólogo"... Le pregunta don Martiriano a su tremenda mujer, doña Jodoncia: "¿Qué es hoy?". "Un inútil" -responde con agrio gesto la mujer. "No, -precisa don Martiriano-. De día". "De día -replica la anfisbena-, y de noche más"... Suena el teléfono en casa de Rosilí. Contesta ella y escucha una voz de mujer que le dice: "Tú estás saliendo con Ovonio Grandbolier ¿verdad?". "Sí, -responde ella-. ¿Quién habla?". "Eso es lo de menos -prosigue la de la voz-. Lo que importa es advertirte que es un irresponsable, un flojo, un cínico, un desobligado...". "-¿Cómo lo sabes?" -se amosca Rosilí. "-¡Porque es mi esposo, idiota!" -estalla la mujer... El tema era las violaciones. "Anoche evité una" -declara Libidiano. Le pregunta con mucho interés un amigo: "¿Cómo fue eso?". Responde muy orgulloso el salaz fornicador: "La convencí"... El Poder Judicial de la Federación se ha convertido en una especie de permanente árbitro para dirimir las contiendas entre el Poder Ejecutivo y el Legislativo, lo mismo que para dictar la última palabra en los procesos electorales. Dentro de poco no habrá decisión alguna en la vida pública de México que no tenga carácter judicial. Eso nos debe preocupar, pues tal situación es indicio de la falta de capacidad de los principales actores de la política para ordenar los asuntos nacionales sin tener que llegar a situaciones de conflicto. Apliquemos a este caso el principio que rige en los deportes, principio según el cual la competencia ?sea pelea de box, sea juego de futbol o basquetbol, etcétera- es tanto peor cuantas más veces debe intervenir el árbitro. A nadie y de nada sirven las pugnas entre los Poderes de la Unión. Deberían trabajar conjuntamente en bien de México y de los mexicanos. Si mis consejos pueden servir a la tarea, dispuesto estoy a darlos. Así quizá se diga alguna vez de mí: "Pro patria pugnavit". A nada más aspiro; con nada menos me conformaré... Así dice el autor, y luego se retira caminando con la misma serena majestad de Leo Genn en "Enrique Quinto" (1945, con Laurence Olivier, Robert Newton y Leslie Banks)... Don Astasio llegó a su casa y, como de costumbre, sorprendió a su esposa Facilisa en los brazos de un forzudo mancebo. Sacó el pobre cuco la libretita donde anotaba denuestos para decirlos a su mujer en tales ocasiones, y empezó: "¡Prostibularia! ¡Ganforra! ¡Entretenida! ¡Mujer de mácula! ¡Galocha!". Todos los adjetivos eran de riguroso estreno, menos "galocha", pues lo había usado ya en 1989. Añade don Astasio: "¡Y en mi propia casa!". Responde la mujer con toda calma: "También es mía?... El señor y su esposa fueron al cine. En medio de una tórrida escena de amor ella le da un codazo a su marido y le dice: "Mira cómo la besa. Tú nunca me besas así". Responde con sequedad el tipo: "A él le pagan"... FIN.
