Subida en una escalera la señora lavaba los vidrios de las ventanas de la calle. Perdió pisada y cayó de pompis en el bote de la basura. Pasó un borrachito, la vio con atención y luego dijo: "-¡Estos ricos que todo tiran! ¡Podía servir por lo menos un año más!"... Uno de los hermanos siameses logró convencer a la guapa chica de pasar con él un agradable rato. Al día siguiente un amigo preguntó a los siameses: "-¿Se divirtieron anoche?". Responden los hermanos: "-Sí y no"... Mr. Hornblower tenía la sospecha de que su esposa lo engañaba. Contrató un detective para que la siguiera. Días después le informa el hombre: "-Sus sospechas han sido confirmadas, señor. Venga conmigo". Hornblower fue en el automóvil del investigador y vio a su esposa con un hombre charlando animadamente en un cafecito estilo francés, con mesas en la acera. Luego los siguieron a un club donde los amantes jugaron una partida de tennis. A continuación fueron a una galería de arte. Después los vieron ir al campo y disfrutar de un picnic a la orilla de un lago encantador. Seguidamente regresaron a la ciudad y vieron una magnífica película. Luego bebieron cocteles en un bar de moda; fueron a cenar y a bailar y finalmente se refugiaron en un recoleto motelito". "-¡Jamás lo habría creído!" -exclama Mr. Hornblower. Pregunta el detective: "-¿Que su mujer pudiera engañarlo?". "-No -responde el marido-. Que pudiera ser tan divertida"... Comentaba Capronio: "-Si mi esposa se muere antes que yo, me casaré con una de sus hermanas, cualquiera". "-¿Por qué?" -se extraña un amigo. Responde Capronio: "-Ya no estaré en edad de domar a otra suegra"... Una muchacha que practicaba el nudismo fue a ver al ginecólogo. "-Está usted embarazada" -le informa el facultativo. "-No puede ser -se consterna ella-. Lo único que hacemos en el campo nudista es mirarnos". Replica el ginecólogo: "-Pues alguno de los socios ha de tener la mirada muy penetrante"... Un tipo llegó a la cantina con un perro. Dijo que el animalito sabía hablar, y lo ofreció en venta. "-Los perros no hablan" -respondió el cantinero, desdeñoso. "-¡Yo sí! -exclama el can-. ¡Cómpreme, señor! ¡Soy artista de cine! ¡He actuado al lado de Lassie! Incluso tuve amores con ella, y también con la french poodle de Julia Roberts, y con todas las hembras del grupo ‘Los 101 Dálmatas’. ¡Ande, señor, cómpreme!". El cantinero se queda estupefacto. "-¡Este perro es una maravilla! -le dice al individuo que lo traía-. ¡Habla de verdad! ¿Por qué lo vendes?". Responde el tipo: "-Ya me tiene harto. Es muy presumido; se la pasa hablando de sus conquistas amorosas"... El entrenador de basquetbol le contó a un colega lo que le había pasado en el último viaje que hizo a la ciudad. "-Me sucedió la cosa más fantástica e increíble que puedas imaginar -le dice-. Fui a cenar a un pequeño restorán. La mesera era guapísima, y noté que le había caído bien. No me cobró la cuenta". "-¡Fantástico" -exclama el otro. "-Y falta lo mejor -prosigue el entrenador-. Le pregunté a qué horas salía del trabajo. Me lo dijo, y la esperé. Fuimos a tomar una copa. Luego, en el coche, estuvimos buen rato besándonos apasionadamente". "-¡Formidable!" -se entusiasma el colega. "-Y falta lo mejor -sigue el entrenador-. Me invitó a su departamento. Ahí bailamos e hicimos el amor hasta el amanecer". "-¡Extraordinario! -prorrumpe el otro-. "-Y todavía falta lo mejor" -dice el entrenador-. "-¿Lo mejor? -se admira su colega-. ¿Qué puede haber mejor que eso?". Responde el entrenador: "-Me presentó a su hermano. ¡¡¡Mide 2.10!!!"... FIN.
