10 de enero de 2004.
WASHINGTON, EU, (SUN-AEE).- El gobierno del presidente George W. Bush considera que debe trabajar con el de México para que su propuesta de reforma migratoria funcione, dijo la consejera de Seguridad Nacional, Condoleezza Rice, quien también consideró como superado el diferendo entre los dos países creado por la guerra en Irak.
En conferencia de prensa previa al viaje del presidente Bush a Monterrey, México, Rice destacó el "extraordinario periodo de cooperación" entre los dos países a propósito del reciente periodo de alerta en Estados Unidos, aunque reconoció que "obviamente, pasamos por un momento difícil a propósito de Irak".
Las relaciones con México "son una de nuestras más importantes y más cercanas", dijo Rice, al puntualizar que hay una cooperación diaria a propósito de cuestiones fronterizas, lucha antinarcóticos y seguridad. "Tenemos una agenda grande con México", dijo Rice.
Puntualizó que la reunión bilateral que Bush y el presidente Vicente Fox sostendrán el próximo lunes por la mañana en Monterrey, antes de la inauguración de la Cumbre Extraordinaria de las Américas, les dará la oportunidad de abordar la iniciativa de trabajadores invitados adelantada esta semana por el mandatario estadounidense.
La iniciativa "cumple con muchos de los principios que enunciaron cuando se reunieron aquí en Washington por primera vez hace un par de años", dijo Rice.
Explicó sin embargo que el proyecto "debe ser trabajado con el Congreso... No es algo que la Rama Ejecutiva pueda hacer por decreto. Y el Congreso tendrá opiniones.
"Hay muchas propuestas (en el Congreso) con las que trabajará la gente, pero para que algo como esto funcione tenemos que trabajar también con el gobierno mexicano".
Definió la propuesta migratoria como "sólida, factible y razonable", a la que el presidente Bush llegó con un conocimiento derivado de su tiempo como gobernador de Texas, tanto de lo "corrosivo" que puede ser el problema como de la contribución de los migrantes a la economía de los Estados Unidos.
"Con los mexicanos -apuntó-, la discusión más general tiene que ser por qué la gente arriesga la vida como lo hace para venir a los Estados Unidos".
En ese sentido señaló que parte de la conversación tendrá que ser sobre el Tratado norteamericano de Libre Comercio (TLC) "porque ultimadamente esas gentes, que claramente son ambiciosas y quieren alimentar a sus familias, deben ser capaces de alimentarlas en México si esa economía mejora".
Fox y Bush hablarán también sobre cuestiones fronterizas, seguridad y relaciones económicas entre los dos países, dijo.
"Espero que la reunión será tan completa como los encuentros que han tenido en el pasado", dijo Rice, quien informó que durante su estancia en Monterrey Bush se encontrará también con los presidentes Ricardo Lagos, de Chile; Luiz Inácio "Lula" da Silva, de Brasil; Néstor Kirchner, de Argentina; Gonzalo Mesa, de Bolivia, y con el nuevo primer ministro canadiense, Paul Martin.
En cuanto a la reunión de las Américas, afirmó que Bush "tendrá la oportunidad de recordar a sus colegas de los beneficios de sociedades y mercados libres y abiertos y de la importancia de elecciones transparentes", así como la necesidad de combatir la corrupción y fortalecer la democracia.