ATAQUE| INSURGENTES MATAN A 23 POLICÍAS
Intenta Gobierno de Allawi garantizar seguridad antes de las elecciones
REUTERS
FALLUJAH, IRAK.- El Gobierno provisional de Irak declaró ayer la Ley Marcial luego que los insurgentes mataran a 23 policías iraquíes y provocaran varias explosiones en Bagdad en una nueva demostración de fuerza antes de una prevista ofensiva de Estados Unidos sobre Fallujah y Ramadi.
?Hemos decidido declarar un estado de emergencia en todas las zonas de Irak, con excepción de la región del Kurdistán, durante un período de 60 días?, dijo Thaer al Naqib, portavoz del primer ministro Iyad Allawi, en una rueda de prensa.
Agregó que el estado de emergencia, equivalente a la Ley Marcial, pretende garantizar la seguridad antes de las elecciones de enero.
El Gobierno se otorgó poderes de emergencia poco después de sustituir a la administración liderada por Estados Unidos en Irak el 28 de junio, pero aún no los ha utilizado pese a una creciente insurgencia.
Momentos después del anuncio realizado en directo en la televisión iraquí, un coche bomba explotó cerca de la casa del ministro de Finanzas de Irak, en el centro de Bagdad, matando al menos a dos personas. Adel Abdul Mahdi no se encontraba allí cuando se registró el ataque.
Los insurgentes han perpetrado una serie de ataques en el centro de Irak para mostrar su fuerza antes del asalto de Fallujah y Ramadi por parte de fuerzas lideradas por Estados Unidos. Los estadounidenses dicen que sólo están esperando órdenes de Allawi, que volvió de Europa el sábado para atacar.
La policía dijo que hombres armados mataron a 23 policías en tres ataques diferentes en Irak. El más sangriento tuvo lugar en Haditha, 200 kilómetros al noroeste de Bagdad, donde insurgentes con lanzagranadas y morteros atacaron una comisaría al amanecer.
Tras un enfrentamiento de 90 minutos en el que resultaron heridos seis policías, los agresores se llevaron a 21 policías capturados a la zona de la estación de bombeo de petróleo K-3 y los mataron a tiros a modo de ejecución.
Shaher al Jughaifi, jefe de seguridad en el oeste de Irak, murió en otro ataque contra una comisaría en la ciudad cercana de Haqlaniya.
Hombres armados mataron a un agente de policía iraquí e hirieron a otro en la localidad de Baquba, al noreste de Bagdad, dijo la Policía. Un coche bomba suicida estalló junto a un convoy de Estados Unidos en la carretera hacia el aeropuerto de Bagdad. Un portavoz militar estadounidense no pudo confirmar la información.
Vecinos de Fallujah dijeron que se produjeron violentos enfrentamientos en el extremo este de la ciudad cerca de la carretera que lleva a Bagdad después de unos intensos ataques aéreos nocturnos y bombardeos de artillería.
Toque de queda en Samarra
El sábado, bombas y ataques contra comisarías de policía mataron a 34 personas, en su mayoría policías, en la conflictiva ciudad de Samarra, 100 kilómetros al norte de Bagdad. La oficina de Allawi dijo que 49 personas también resultaron heridas. Todas las víctimas eran hombres.
Tropas estadounidenses impusieron un toque de queda de 24 horas en Samarra y localidades cercanas, paralizando la vida normal.
Responsables locales dijeron que habían pedido a los estadounidenses que levantaran el toque de queda al menos brevemente para que la gente pudiera ir a las mezquitas y las tiendas. También querían que las tropas de Estados Unidos reabrieran las carreteras alrededor de la ciudad sellada.
La matanza de Haditha recordó la de 49 reclutas desarmados el mes pasado en una carretera solitaria al noreste de Bagdad.
El grupo aliado de Al Qaeda, el jordano Abu Musab al Zarqawi, que reivindicó entonces esa masacre, también dijo que estaba detrás de los coches bomba que estallaron el sábado en Samarra.
El Ejército de Estados Unidos dice que de mil a seis mil combatientes, incluyendo algunos leales a Zarqawi, están escondidos en Fallujah.
SELLAN ACCESOS A FALLUJAH
El Ejército estadounidense anunció ayer que ha sellado los accesos a la ciudad de Fallujah, mientras comienza una serie de bombardeos sobre el sur y el este de la ciudad, informó ayer la cadena de televisión Al Jazzera.
Según la cadena, fuertes bombardeos de artillería han sacudido estos barrios de la ciudad (60 kilómetros al oeste de Bagdad), mientras que ?un número enorme de tropas? estadounidenses ha penetrado por la parte este de la ciudad.
El Ejército estadounidense ha interrumpido también el tráfico hacia o desde la ciudad, para ?acabar con los preparativos finales del asalto a la ciudad?, según el comunicado militar norteamericano.
Este comunicado añade que las restricciones de tráfico y de movimiento humano se toman de acuerdo con las disposiciones del Estado de Emergencia anunciadas ayer por el Gobierno iraquí.
El cuerpo que lleva a cabo las operaciones es el equipo de combate de la Segunda Brigada de la Primera División de Caballería.
El Gobierno iraquí y las tropas estadounidenses creen que en Fallujah se esconde el ?núcleo duro? de la resistencia iraquí, así como numerosos combatientes extranjeros que militan en grupos radicales islámicos y que perpetran numerosos atentados contra las tropas extranjeras y la policía iraquí.
La ciudad, situada en el centro del ?triángulo suní?, ya fue objeto el pasado abril de una imponente ofensiva militar, pero se saldó con una frágil tregua no declarada oficialmente según la cual las tropas extranjeras se mantenían fuera de la ciudad y el orden era garantizado por una fuerza especial creada ?ad hoc?.
Asesinan a funcionarios
Los cadáveres de cuatro iraquíes aparecieron ayer en el sur de Kirkuk, 400 kilómetros al norte de Bagdad, que se suman a otros tres hallados también ayer en la provincia de Diyala, al sur de la capital iraquí.
Las cuatro víctimas aparecidas en la región de Kirkuk trabajaban para las tropas norteamericanas en la zona, pero no se sabe hasta el momento quiénes son los asesinos, informaron fuentes de la policía local.
Fuentes policiales anunciaron ayer por la mañana que los cadáveres de tres funcionarios iraquíes habían aparecido cerca de la localidad de Mahmudiya, a 40 kilómetros al sur de la capital iraquí, sin detallar cuándo fueron asesinados.
Tampoco explicaron cuándo fueron encontrados y se limitaron a indicar que Jasem Abed, vicegobernador de Diyala, y de Shehab Maki y Duraid Fadel, miembros del ayuntamiento local, fueron asaltados por pistoleros cuando se dirigían a la ciudad meridional de Kerbala para asistir al funeral de un compañero asesinado el jueves.
Los miembros de los ayuntamientos locales y las fuerzas de Seguridad iraquíes se han convertido en objetivo frecuente de la insurgencia, que les tilda de ?colaboracionistas? con las fuerzas de ocupación.
En las últimas semanas, más de una veintena de nuevos agentes iraquíes han sido asesinados por insurgentes en las provincia Diyala, un área agrícola ubicada en el denominado ?triángulo de la muerte?, al sur de Bagdad.