Acordaron evitar la aprobación que cancela los derechos de los migrantes al servicio de salud de emergencia.
15 de mayo de 2004
Guadalajara, Jal. (SUN-AEE).-En el marco de la 43 Reunión Interparlamentaria, congresistas mexicanos y estadounidenses establecieron, seis compromisos básicos sobre el reforzamiento de los mecanismos para seguridad nacional y la defensa de los derechos humanos de los connacionales indocumentados en Estados Unidos.
Ante la imposibilidad de un acuerdo migratorio este año, confirmado por Jim Kolbe, presidente de la delegación parlamentaria estadounidense, durante la inauguración del evento diputados y senadores nacionales lograron de su contraparte acuerdos de "honor y de palabra" para impulsar a corto y mediano plazos las siguientes acciones: Evitar la aprobación de la iniciativa estadounidense H.R.3722 (Undocument Alien Emergency Medical Assitance Amendments), la cual de aprobarse cancelará los derechos de los migrantes a los servicios de salud de emergencia.
Esa propuesta iba a ser discutida la próxima semana, pero el representante republicano David Dreier se comprometió a incorporarla al Comité de Reglas, presidido por él, para que se someta al under suspension , proceso que requiere del voto en pro difícil de lograr de las dos terceras partes del Congreso estadounidense para ser aprobada.
Documentar, acreditar o legalizar a la mayor parte de los jornaleros y obreros migrantes mexicanos en Estados Unidos, para evitar lo que el representante republicano Jim Kolbe definió como "el riesgo de que el germen del terrorismo se presente a través del anonimato de los indocumentados".
Tal medida es, al mismo tiempo, parte de la estrategia de seguridad nacional estadounidense ante el terrorismo.
El senador de la República, Germán Sierra (PRI), y los diputados federales Manlio Fabio Beltrones (PRI) y Juan José García (PRD) explicaron que los congresistas estadounidenses informaron que no tienen un solo informe que involucre a migrantes mexicanos en movimientos, acciones o antecedentes de terrorismo en aquella nación, lo que brinda confianza para emprender esas medidas migratorias y de seguridad.
La canalización de recursos del fondo compensatorio del Tratado de Libre Comercio (TLC) a las entidades mexicanas expulsoras de migrantes, a fin de incentivar el campo mexicano. Se trata de una medida que compensaría la asimetría del subsidio estadounidense a la producción de semillas que envía a México.
Regularizar en Estados Unidos, como en México, las empresas de "envío de dinero", a fin de que el proceso de transferencia de las remesas tenga el menor costo para los connacionales que mandan recursos a sus parientes en los estados mexicanos.
Certificar a todos los mexicanos que garanticen ingresos de recursos a la nación norteamericana a través del cruce de la frontera. Para ello se informó que se analiza la instalación de mecanismos de registro digitalizado para dar trato preferencial a los migrantes que cubran ese perfil.
Que los legisladores estadounidenses demócratas o republicanos que se beneficien con el resultado de la elección presidencial del mes de noviembre próximo mantengan el impulso para la realización de un acuerdo migratorio de largo plazo con México.