La ampliación de la matrícula ha perjudicado el sistema de aprendizaje, ya que son muchos los niños que asisten a las escuelas, lo que arroja menos resultados.
05 de agosto 2004.
México, (Notimex).- El director general del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), Felipe Martínez Rizo, aseguró que la cobertura educativa ha tenido avances significativos, sobre todo en el nivel primaria, pero la calidad del aprendizaje aún es deficiente.
A dos años de la creación de este instituto, Martínez Rizo dijo que, no obstante, los logros no deben de minimizarse, pues el hecho de darle escuela a casi todos los niños de primaria es de reconocerse.
En conferencia de prensa explicó que paradójicamente la ampliación de la matrícula ha perjudicado el sistema de aprendizaje, ya que es demasiado el número de niños que asisten a las escuelas, lo que ha obligado a imponer dobles turnos, que en realidad arrojan menos resultados que una jornada completa.
El especialista dio a conocer que en el nivel de secundaria al contrario de la primaria la cobertura es menor, pero hay otros problemas como la multiplicidad de materias que orillan al alumno a reprobar alguna de éstas, lo que es el principio de la deserción.
No obstante, la prioridad actual es hacer realidad lo que la Constitución Política Mexicana precisó desde 1993, como es aplicar la obligatoriedad de la secundaria.
En cuanto a la educación preescolar externó la necesidad de aumentar el número de alumnos y habilitar edificios para obtener mejor desempeño durante la primaria, pero en caso de no darse a corto plazo, no es tan trágico en comparación con la deserción en secundaria.
Acompañado de otros especialistas y los encargados de esta área en los diferentes estados de la República, Martínez Rizo dijo que para el segundo informe que presentará en noviembre próximo, no se esperan cambios espectaculares, pero sí ligeros avances, puesto que los grandes sistemas educativos avanzan lentamente.
Indicó que aunque el organismo que representa se ha convertido en un referente en el que pueden confiar los actores educativos, el gran reto es integrar un verdadero sistema nacional de evaluación, pues para calificar el nivel de una escuela no se pueden basar en el promedio de los alumnos, ya que esto sólo representa un elemento.
Martínez Rizo agregó que en sus dos primeros años de trabajo, el INEE elaboró el desarrollo conceptual de un sistema de indicadores completos y además en el campo de pruebas nacionales se efectuaron 10 análisis de resultados de las pruebas aplicadas de 1998 a 2002 y se inició una nueva generación de pruebas, misma que está en proceso.
