"El presidente dejó en claro que se opondría a cualquier ataque contra el señor Arafat", dijo el secretario estadounidense Collin Powell.
24 de abril de 2004.
WASHINGTON, (Reuters) - El presidente de Estados Unidos le ha dicho al primer ministro israelí Ariel Sharon que se opone a cualquier intento de Israel de atentar contra la vida del presidente palestino Yasser Arafat, dijo el viernes el secretario de Estado estadounidense Colin Powell.
Sharon dijo el viernes que le expresó a Bush la semana pasada en Washington que ya no se sentía ligado a la promesa de que no atacaría a Arafat.
"El presidente dejó en claro que se opondría a cualquier ataque contra el señor Arafat", dijo Powell durante una entrevista en el programa "Nightline", del canal ABC, a última hora del viernes.
"Y el presidente cree firmemente que tiene un compromiso del primer ministro Sharon de que no se hará ningún intento similar".
Los comentarios de Powell lo convierten en el funcionario de mayor rango del gobierno de Bush que se opone abiertamente a los planes de Sharon con respecto a Arafat.
Preguntado sobre cuales serían las consecuencias si Arafat era asesinado, Powell dijo "Yo creo que serían considerables y también lo cree así el presidente, y por eso es que ha expresado su posición al primer ministro Sharon".
Durante la visita de Sharon a Washington la semana pasada, Bush apoyó el plan para retirarse de Gaza que lanzó el mandatario israelí, e implicitamente reconoció los derechos de Israel sobre territorios en Cisjordania que los palestinos consideran propios.
Sharon declaró al Canal 2 de Israel que le dijo a Bush que se había liberado a si mismo del compromiso de no lastimar a Arafat. "Yo dije en nuestro primer encuentro, hace tres años, que aceptaba su pedido de no dañar fisicamente a Arafat", expresó Sharon.
Arafat listo para ser mártir
EFE
El presidente palestino, Yaser Arafat, respondió hoy a las amenazas del primer ministro israelí, Ariel Sharon, al decir a una multitud que se congregó en la Múkata de Ramala que está listo para el "martirologio".
"Todos nosotros somos mártires en espera", dijo Arafat en la sede de sus oficinas, donde acudieron unas 4.000 personas que se solidarizaron con el líder de la OLP con lemas como nos sacrificaremos con nuestra sangre y alma".
Arafat, de 74 años, que hizo la señal de la victoria ante la multitud, manifestó que "quiero decir a Sharon y a sus seguidores que el viento no puede hacer temblar una montaña".
Entre los simpatizantes se encontraban un grupo de sindicalistas franceses, suizos y dos españoles dispuestos a actuar como "escudos humanos" en caso de agresión israelí contra Arafat.
