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MÉXICO, DF.- La contralora capitalina Bertha Elena Luján defendió a Gustavo Ponce Meléndez, al considerar que es una presunción vincular al ex secretario de Finanzas con el fraude de 31 millones de pesos en la Tesorería.
Sin embargo, señaló que ampliará la auditoría que aplica la Contraloría del Distrito Federal en otras áreas de la Secretaría de Finanzas y no descartó que sea en la oficina del ex titular de esta dependencia.
Aceptó que fue después del video que se transmitió en la televisión cuando se enteró de que el ex servidor público realizaba viajes a Las Vegas y utilizara días hábiles para divertirse. Dijo que la Dirección de Administración de Finanzas de la Secretaría debe tener un control de permisos.
En conferencia de prensa, la funcionaria presentó un resumen de la declaración patrimonial de Ponce Meléndez con fecha de agosto de 2003.
Informó que el ex funcionario es propietario de dos departamentos que compró en 1986 y 1992 con un valor de un millón de pesos; una casa en la delegación Coyoacán que adquirió en 1993 con un costo de 450 mil pesos y otro departamento que fue donado por su madre en 2001.
Además un automóvil Volvo Sedán modelo 2002, cuyo costo es de 550 mil pesos. Adeuda 200 mil.
Tres cuentas bancarias, una de 2,700 pesos; otra de 60 mil dólares y una más abierta.
La contralora se comprometió a entregar información de las declaraciones patrimoniales anteriores del funcionario y ante los cuestionamientos en el sentido de que la Contraloría no detecta actos de corrupción, dijo que de ninguna manera está solapando irregularidades o está cruzada de brazos.
