03 de mayo de 2004.
Ciudad de México, - El empresario Carlos Ahumada, deportado la semana pasada por Cuba a México, acusó al régimen de la isla de haberlo forzado a confesar su participación en una supuesta conspiración política contra autoridades mexicanas, informa hoy la prensa mexicana.
Ahumada, recluido en un penal de Ciudad de México desde el miércoles, aseguró en un texto distribuido por sus abogados que sus supuestas declaraciones son falsas, "ya que fueron arrancadas por medio de presión moral y psicológica".
El empresario de la construcción, acusado de un fraude de tres millones de dólares y de estar detrás de un supuesto complot contra el gobierno centroizquierdista de Ciudad de México, aseveró que fue obligado a contestar preguntas.
Según Cuba, Ahumada confesó que había planeado con meses de antelación, antes de huir de México, la difusión de unos videos en los que se lo ve entregando dinero a funcionarios del gobierno capitalino.
Ahumada "ha declarado que la operación realizada con empleo de los videos sobre corrupción difundidos en México fue calculada deliberadamente para alcanzar objetivos políticos", sostuvo el gobierno cubano al anunciar la deportación la semana pasada.
El empresario no desmintió haber hecho tales afirmaciones, pero sostiene que declaró bajo presión y que en los interrogatorios Cuba le decía qué respuesta debía dar sobre diversos temas políticos.
"Me señalaban a figuras de la vida pública y política de nuestro país, personas que nunca he tenido la oportunidad de conocer", indicó.