EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- El regidor por el Partido Acción Nacional (PAN), Roberto Favela Escobedo, denunció que desde hace varias semanas se venció el permiso provisional para la venta de bebidas embriagantes del restaurante, ?La Caverna del Tío Homero?, que opera en la planta baja del hotel San Francisco.
De acuerdo a lo que comenta el regidor, se trata de una autorización de un mes concedida por el titular de la Dirección de Alcoholes, José Luis Longoria Rodríguez, porque el bar oficial del lugar era sometido a un proceso de remodelación.
El regidor panista informó que los trabajos de rediseño fueron concluidos hace varias semanas del establecimiento referido, que se encuentra en el segundo piso del hotel y que cuenta con licencia debidamente reglamentada.
El problema es que en estos momentos, las bebidas etílicas se están expendiendo en ambos lugares, por lo que de inmediato fue notificada la irregularidad a Longoria Rodríguez, quien aseguró que tomaría cartas en el asunto.
?Eso fue hace dos semanas y por lo visto, no se ha actuado en consecuencia, pues la problemática continúa pese a que él como autoridad competente está enterado y es la facultad para regular esta anomalía?, manifestó.
El permiso caducado establece que se trata de un restaurante bar, pero ha resultado un ?antro?, pues sólo se venden bebidas embriagantes a un alto costo donde acuden en su mayoría, los llamados ?juniors? o hijos de papá.
Algo que le causa extrañeza al regidor Favela Escobedo, es que se ha sorprendido a los empelados del bar oficial del hotel San Francisco, transportando comida mexicana del restaurante ?San Pancho?, ubicado casi en contra esquina de este lugar.
?Se hace raro lo anterior, puesto que la licencia expedida señala que aparte de bar es un restaurante, donde se supone se preparan platillos diversos. Es algo que llama la atención y que las dependencias correspondientes deben investigar?, señaló el panista.
?Escándalos?
Las denuncias de la ciudadanía señalan que en la ?Caverna del Tío Homero?, los escándalos son muy frecuentes dada la demanda que tiene el lugar, puesto que se permite la venta de bebidas alcohólicas a altas horas de la madrugada.
De acuerdo a los quejosos llegan carros con sus estéreos a alto volumen, que no los dejan dormir.
La situación se agrava porque tanto en el primer piso como en la planta baja, el hotel San Francisco cuenta con dos establecimientos en donde los jóvenes tienen la facilidad de tomar alcohol sin aparentes restricciones.