El británico Danny Williams noqueó en el cuarto round al campeón mundial de pesos pesados.
31 de julio de 2004
LOUISVILLE, Estados Unidos (Reuters) .- El púgil británico Danny Williams produjo una de las mayores desilusiones en la historia del boxeo al noquear al ex campeón mundial de los pesos pesados, el estadounidense Mike Tyson, en el cuarto asalto de la pelea que ambos disputaron en Louisville, en el estado de Kentucky.
Tyson dominó el inicio del combate, conectando varios golpes importantes, pero poco a poco Williams empezó a tomar el control contra el fornido ex monarca de la máxima categoria, de 38 años.
Williams, de 31 años, se lanzó a una abierta ofensiva y con una seguidilla de directos envió a Tyson a la lona a los 2 minutos 51 segundos.
El árbitro Dennis Alfred detuvo la cuenta para llevar a Williams a su rincón antes de detener la pelea, mientras un tambaleante Tyson apenas podía ponerse en pie.
"Demostré que soy un guerrero", dijo Williams a la televisión al finalizar el combate. "Me golpeó en los primeros momentos del primer asalto, pero me recuperé y tuve inteligencia para boxear", agregó.
"Estaba seguro de que iba a ganar. Sabía que tenía la capacidad para vencerlo", dijo. También señaló que espera que su contricante le pida la revancha.
Vencido y apaleado, Tyson quedó sentado indefenso en un rincón con el rostro sangrante. El otrora temido ogro del boxeo tenía la mirada perdida en el vacío.
En su rincón, el derrotado se disculpó a su entrenador. En el otro extremo del ring, Williams celebró y le propuso matrimonio a su novia, que aceptó enseguida.
Y simultáneamente, un grupo de abogados empezó a pensar de qué modo Tyson podrá pagar los 38 millones de dólares que debe ahora que su valor se desplomó tras una derrota tan aplastante.
"La gente se olvida que no era un Mike Tyson en su mejor momento. Era un Tyson de 38 años'', dijo Williams. ``Pensé que podía ganar''.
El británico liquidó la pelea con una lluvia de golpes que enviaron a su rival contra las cuerdas en el cuarto asalto. Con la sangre que le caía por la cara Tyson pareció contemplar el final y luego hizo un esfuerzo por ponerse de pie pero el árbitro decretó el final a los 2:51.
"Lo siento. Estoy decepcionado'', dijo Tyson a su entrenador Freddie Roach. ``No tienes que disculparte conmigo'', le respondió éste.
Tyson, con un récord de 44 nocauts en 57 peleas, sólo pareció ser el que en otro tiempo deslumbró al mundo en los dos primeros asaltos. Luego, tras sufrir un corte en la ceja derecha, su impulso inicial se fue desvaneciendo.