Se esparce la rebelión contra las fuerzas de ocupación en Irak
EL SIGLO DE TORREÓN
/ AGENCIAS
MADRID, ESPAÑA.- Seguro del apoyo de la calle, el joven clérigo shii Muqtada al Sadr volvió a desafiar a Estados Unidos, mientras que por tercer día consecutivo continuaron las protestas de sus seguidores en todo el país.
Muqtada, cuyos hombres controlan la ciudad santa de Nayaf, ha ofrecido la “ciudad liberada” a Alí al Sistani, máxima autoridad religiosa shii, tras haberse trasladado allí desde la vecina Kufa, donde en teoría estaba rodeado por fuerzas norteamericanas llegadas para detenerle. Además, exigió la retirada de los ocupantes para suspender la insurrección.
El administrador civil estadounidense para Irak, Paul Bremer, minimizó los ataques shiitas.
“Tenemos problemas, no vamos a negarlo, pero básicamente Irak está en el camino para hacer un Irak democrático”, declaró Bremer a una cadena de televisión de su país.
En opinión de la máxima autoridad civil de la coalición, lo que está viviendo Irak estos días “no es una insurrección”, sino que se trata de violencia vinculada a “una milicia ilegal dirigida por un grupo de gente fuera de la Ley”. “Vamos a ocuparnos de ellos”, aseguró.
“El levantamiento continuará y no negociaremos a menos que cumplan nuestras exigencias, que son la retirada de las zonas pobladas y la liberación de los prisioneros”, declaró el jeque Qays al Jazali durante una conferencia de prensa en Nayaf.
Al Jazali leyó un comunicado de Muqtada en el que el clérigo hace un llamamiento a los países con fuerzas en Irak para que retiren a sus soldados. “Esta insurrección muestra que los iraquíes no están satisfechos con la ocupación y que no aceptarán la opresión”, manifestaba Muqtada en el texto leído por Al Jazali.
“Dirijo mis palabras al gran demonio, Bush y pregunto ¿quién se opone a la democracia? El que aboga por la resistencia pacífica o el que bombardea el país y derrama sangre?”, proseguía.
Todos los intentos de mediación entre los rebeldes y las fuerzas de la coalición parecen haber fracasado hasta ahora. “Despachamos emisarios ante Muqtada para advertirle de que la situación es muy grave y que cualquier exceso puede tener consecuencias desastrosas”, confió ayer Adnán el Asadi, del partido Al Dawa.
Asaltos extremistas
Por tercer día consecutivo, las revueltas proseguían ayer en Bagdad y en otras ciudades de mayoría shii, sobre todo en Nasiriya.
Las protestas no sólo no han sido espontáneas sino que responden a un plan perfectamente trazado: Manifestaciones, toma de edificios oficiales, de forma pacífica si es posible y negociación con las autoridades desde una posición de fuerza. Así ha sucedido en Kut, donde ayer patrullaban conjuntamente los milicianos de Al Sadr y las fuerzas de seguridad iraquíes.
Los seguidores de Muqtada empezaron las protestas el domingo y lograron desalojar a los soldados ucranios de la sede del Gobierno provincial. También ocuparon las comisarías de policía y el edificio de la televisión.
El lunes negociaron su participación en el mantenimiento de la seguridad. Aunque a última hora de ayer llegaban noticias de que su toma de poder no había sido tan pacífica: Un soldado ucranio ha resultado muerto y seis heridos.
Más al sur, en Amaralos hombres de Al Sadr se enfrentaron con las tropas británicas. Entre el lunes y ayer, los enfrentamientos han dejado 12 iraquíes muertos y 27 heridos. Sin embargo en Basora, los militares británicos negociaron con el representante de Muqtada, el jeque Salem Adel Saleh y consiguieron que los milicianos abandonaran la sede del Gobierno provincial a cambio de que sólo la policía iraquí patrulle las calles de la ciudad.
Por su parte el Pentágono informó que al menos 12 infantes de Marina de EU murieron ayer en un enfrentamiento ocurrido en la ciudad iraquí de Ramadi, sin que se precisaran más datos de los hechos ocurridos.
Además un total de 12 soldados italianos de un cuerpo especial de infantería resultaron heridos en enfrentamientos con iraquíes ocurridos ayer en la ciudad iraquí de Nasiriya, confirmó el Estado Mayor del Ministerio italiano de Defensa. Además, 15 ciudadanos iraquíes habrían muerto en los incidentes.
Mientras, ha continuado la Operación Resolución Valiente contra la insurgencia suní en Fallujah, desde donde llegaban informaciones de fuertes combates. Las fuerzas estadounidenses reconocieron haber perdido cuatro “marines” el ayer en la provincia de Al Anbar.
La situación es tan peligrosa en todo el país que no sólo la Coalición ha anulado una feria comercial prevista para esta semana, sino que el Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados ha suspendido las repatriaciones de iraquíes de momento.
Incluso el Gobierno de Irán ha pedido a sus ciudadanos, los únicos “turistas” que estos días visitan Irak, que dejen de viajar al país vecino mientras continúen las tensiones.
