MADRID, ESPAÑA.- Una falsa amenaza de bomba en el interior del Estadio Santiago Bernabeu, difundida tras una llamada en nombre de ETA al diario ?Gara?, cortó de raíz el duelo entre el Real Madrid y la Real Sociedad a falta de dos minutos para el final y amargó el desarrollo de la decimoquinta jornada de la Liga española de futbol, que hasta entonces transcurría con total normalidad.
El desenlace del partido, con empate a uno en el momento de la suspensión, queda pendiente del resultado de la reunión que hoy mantendrán la Federación Española de Futbol con los representantes de ambos clubes.
El colegiado Vicente José Lizondo Cortés acudió a la llamada del cuarto árbitro, Roberto Carlos Jallas Amigo, que explicó la situación y el juez de la contienda decidió suspender el partido en el minuto 88.
El sonido local del estadio informó a los 70,000 espectadores que acudieron al encuentro. Solicitó un desalojo de forma ordenada. Incluso se abrió el acceso del terreno de juego para que los aficionados ubicados en el primer anfiteatro dejaran el recinto directamente desde el césped hacia las puertas de salida.
En ocho minutos, según fuentes policiales, el estadio quedó vacío. Los artificieros de la Policía Nacional inspeccionaron las instalaciones y rastrearon todas las zonas del estadio en busca del artefacto, que según la amenaza, tenía prevista su explosión a las 21:00 horas (14:00 tiempo de La Laguna).
Una hora y media después la policia levantó progresivamente el dispositivo de inspección de las instalaciones del estadio Santiago Bernabeu, al no encontrar ningún artefacto explosivo.
La evacuación fue rápida y ordenada, aunque no exenta de escenas de miedo que invadieron el ánimo de algunos espectadores que trataban de abandonar el Santiago Bernabeu a la carrera.
Mientras, los jugadores y técnicos de los dos equipos, los directivos y los medios de comunicación salieron también del recinto, desprovistos de sus enseres y aguardaron expectantes y pacientes las indicaciones de la policía.
Esta no es la primera vez que el Estadio Bernabeu es objetivo de una acción terrorista. El uno de mayo de 2002, antes del partido Real Madrid-Barcelona de las semifinales de la Liga de Campeones, explotó un coche-bomba, colocado por ETA, frente al recinto madridista que causó heridas a 17 personas, todas de carácter leve, lo que no impidió el desarrollo normal del encuentro.
?Los avisos de la bomba eran serios y por eso se decidió suspender el partido?, apuntó Julio Cendal, responsable de seguridad del Real Madrid.
Todo el perímetro que configuran las calles aledañas al Estadio Santiago Bernabeu fueron cortadas al tráfico. La policía, por medidas de seguridad, hizo un barrido en los teléfonos celulares de toda la zona, por lo que las cabinas telefónicas del estadio se colapsaron de gente que quería llamar a sus casas para tranquilizar a los familiares.
José María Amorrortu, técnico de la Real Sociedad, aseguró que la expedición donostiarra ?pasó pánico?, en el momento en que el árbitro les comunicó que había un aviso de bomba y debían abandonar inmediatamente el terreno de juego del Estadio Santiago Bernabeu.
Por su parte, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, explicó que ?una vez que la policía vio que no había peligro autorizaron la entrada hasta los vestuarios. Algunos jugadores, que tenían el coche estacionado en el estadio, se han ido a casa directamente. Otros han preferido entrar a recoger sus cosas?, comentó.
El presidente madridista destacó ?la serenidad de la gente, que ha salido del estadio en muy poco tiempo, sin carreras, con normalidad... Ese el hecho positivo de algo tan desagradable. Estos hechos no deberían producirse porque nadie entiende qué ventajas tiene algo así?.
La expedición de la Real Sociedad regresó a San Sebastián, sin dar opción a que el partido contra el Real Madrid pueda reanudarse hoy, al considerar que los jugadores no están en condiciones de volver a jugar tan pronto.
Interior señala que se desalojó estadio por ?verosimilitud aviso?
El desalojo del Estadio Santiago Bernabeu estuvo justificado ?ante la verosimilitud del aviso? y la decisión fue adoptada por los responsables policiales tras valorar ?todas las circunstancias que concurrían en la verosimilitud del aviso?, informó el Ministerio del Interior en una nota de prensa.
Interior añade que el desalojo del estadio se produjo en el ?tiempo mínimo indispensable? y ?sin que se haya registrado ningún riesgo para la seguridad de los espectadores?.
Ante esto, la policía tomó la decisión que tenía que adoptar fundamentalmente teniendo en cuenta que lo prioritario era garantizar la seguridad de todas las personas que se encontraban en el estadio, llevándose adelante el desalojo ?con una total eficacia y con la colaboración de los servicios de seguridad del Real Madrid?.
Por último, Interior señala que la policía está realizando las investigaciones ?precisas? para localizar y detener al autor o autores de la llamada telefónica que alertó de la colocación de un artefacto explosivo.
Ya pegó ETA una vez
ETA hizo explotar el uno de mayo de 2002 un coche bomba frente al Estadio Santiago Bernabeu cuatro horas antes de que comenzara el partido entre el Real Madrid y el Barcelona, de la Liga de campeones, sin causar víctimas mortales.
La deflagración se produjo a las 16:55 horas en los bajos de la Torre Europa, en la Plaza de Lima, justo enfrente del Estadio Santiago Bernabeu, cuando los primeros aficionados empezaban a dirigirse al coliseo madridista.
La explosión afectó levemente la estructura de dicho edificio y produjo la rotura de varios ventanales del otro lado del Paseo de La Castellana.
Los servicios médicos desplazados al lugar de los hechos tuvieron que atender a 17 heridos con ligeros cortes, crisis de ansiedad y contusiones. Tan sólo uno de ellos necesitó ser hospitalizado por varios traumatismos.
Según fuentes de la investigación, 25 minutos antes de la explosión una persona en una llamada telefónica al diario ?Gara? había advertido de la colocación del coche bomba, tras lo cual avisaron los servicios de DYA que alertaron a su vez a las Fuerzas de Seguridad.
Media hora más tarde, hizo explosión un segundo coche bomba en la zona de Embajadores. Según las mismas fuentes, se trataría del vehículo en el que huyeron los terroristas tras la colocación del primero.
La confusión creada tras el atentado no afectó, sin embargo, al normal desarrollo del encuentro, de vuelta de la semifinal de la Liga de Campeones, y el Príncipe Felipe, como muestra de solidaridad de la Corona española con los ciudadanos y, especialmente, con los heridos en el atentado terrorista, asistió al encuentro.
El Estadio Santiago Bernabeu figuraba también como uno de los objetivos que aparecieron en la documentación intervenida a los detenidos en la segunda fase de la operación Nova, que formaban una célula islamista dispuesta a tomar el relevo de la que pretendía atentar contra la Audiencia Nacional española.
Entre esos objetivos estaban también las estaciones de Atocha y Príncipe Pío, la torre Picasso, la sede del Partido Popular y el Palacio de Exposiciones y Congresos.