AGENCIAS
EL CAIRO, EGIPTO.- El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó la desaparición de toneladas de explosivos de un almacén en Irak.
Melissa Fleming, portavoz del OIEA en Viena, indicó que, según el Ministerio iraquí de Economía, unas 380 toneladas de material explosivo, tipo HMX y RDX, fueron sustraídas de una antigua base militar en Irak.
Fleming reconoció que su organización recibió el diez de octubre pasado el informe de las autoridades iraquíes sobre la desaparición del armamento y que se desconoce cómo o quién sustrajo el material explosivo.
Los materiales pueden ser utilizados para provocar la explosión de una bomba nuclear, dijo Melissa Flemming, precisando que la agencia de la ONU también se preocupa de que estos potentes explosivos hayan podido ?caer en malas manos, de terroristas?.
Medios de comunicación estadounidenses señalaron, por su parte, que los explosivos desaparecieron de la base militar de Al Kakaa, al sur de Bagdad, poco después de que EU invadiera el país árabe, en marzo del pasado año.
Alrededor de 380 toneladas de poderosos explosivos ?utilizados para demoler edificios, hacer cabezas de misiles y detonar armas nucleares- han desaparecido de una antigua instalación militar iraquí que se supone estaba bajo resguardo del Ejército estadounidense, reveló el diario The New York Times.
La investigación periodística, realizada por el diario en conjunto con un programa televisivo, establece que no queda claro si el presidente George W. Bush ha sido informado de la desaparición, pero afirma que la que sí está al tanto del caso es su consejera de seguridad, Condolezza Rice.
El diario agrega que la CIA (Agencia Central de Inteligencia de EU) ya fue instruida para investigar la desaparición de los explosivos, principalmente de los tipos denominados como HMX y RDX, que, por ejemplo, en una cantidad menor a medio kilo fueron suficientes para provocar la caída del vuelo 103 de Pan Am sobre Lockerbie, Escocia, en 1988, donde murieron decenas de personas.
Demandan informe
El aspirante demócrata a la Casa Blanca, John Kerry, exigió ayer respuestas al presidente George W. Bush sobre la desaparición de casi 400 toneladas de explosivos convencionales en Irak, en momentos en que la carrera electoral entra en su recta final.
En una campaña marcada por la pregunta básica acerca de quién garantizará mejor la seguridad de Estados Unidos, el campo demócrata se abalanzó sobre las revelaciones de los explosivos faltantes.
?Hoy, la administración Bush debe responder por lo que podría ser el error más grave y catastrófico en la trágica serie de equivocaciones en Irak?, dijo Joe Lockhart, asesor de Kerry, en un comunicado emitido antes del amanecer.
?¿Cómo fracasaron en salvaguardar casi 380 toneladas de explosivos (...) pese a las claras advertencias del Organismo Internacional de Energía Atómica para que lo hicieran? ¿Por qué esta información fue sacada a luz por la prensa? ¿Estaba acaso encubierta por nuestros funcionarios de seguridad nacional??, se preguntó Lockhart.
?Estos explosivos pueden ser utilizados para volar aviones, edificios, atacar a nuestras tropas y detonar armas nucleares?, dijo.
?La administración Bush sabía dónde estaba este arsenal, pero no tomó ninguna medida para proteger el sitio?, añadió.
El OIEA confirmó la información publicada por el diario The New York Times, según la cual el actual Gobierno interino iraquí expresó a la agencia su preocupación por estas desapariciones.
