Notimex
MÉXICO, DF.- Al menos 40 por ciento de los nuevos empleados que contratan las empresas a nivel mundial son mujeres, no obstante, sólo uno por ciento de éstas llega a posiciones de alta jerarquía como la dirección general.
Esta situación demuestra que no obstante que en los últimos años la mujer ha demostrado capacidades y el amplio reclutamiento en el mundo corporativo, el proceso de selección y las oportunidades para crecer son muy selectivas.
De acuerdo a una revista especializada, la empresa moderna muestra una incapacidad manifiesta para aprovechar al máximo el talento femenino.
Los principales obstáculos para que las mujeres directivas y empresarias se desarrollen, apunta, son una arraigada cultura corporativa masculina y falta de confianza en la capacidad de combinar de manera flexible y adecuada el trabajo, su familia y la sociedad.
Subraya que aún cuando están más preparadas que en otras épocas y demuestran su talento desde los estudios universitarios hasta las maestrías de negocios o de especialidad, no se está aprovechando al máximo su talento.
Así, añade, se puede observar que los criterios aplicados para calificar el desempeño femenino no están siendo definidos con equidad de género y como consecuencia, un creciente número de mujeres se decide a emprender negocios por su cuenta.
Un censo aplicado en Estados Unidos reveló que 38 por ciento de las compañías nuevas nacidas de dicha iniciativa personal habían sido fundadas por féminas.
El estudio permitió determinar que las mujeres empresarias toman la iniciativa de emprender un negocio como una búsqueda de satisfacción personal, deseo de autonomía y flexibilidad, toda vez que hacer dinero no es la idea fundamental.
Denuncian bajos salarios
Más de la cuarta parte de familias trabajadoras en Estados Unidos, que incluyen a 20 millones de niños, ganan salarios bajos y se les dificulta sobrevivir, reveló hoy un informe de la organización Proyecto de Familias Trabajadoras.
El informe de la organización no partidista indicó que muchos de los trabajos ofrecen bajos salarios y no dan beneficios laborales y que, además, los trabajadores estadounidenses no están preparados ni reciben apoyo para conseguir mejores empleos.
"Los que trabajan deben de tener la capacidad de mantener a su familia con la confianza de que el trabajo duro y continúo los llevará a un mejor futuro. Pero para muchas familias estadounidenses, esa noción es atrayente pero remota", señaló.
El reporte, que cita datos del Censo del año 2000, señaló que 9.2 millones de familias con al menos un trabajador adulto y un niño menor de 18 años -un 27.4 por ciento de esas familias- están en la categoría de bajos ingresos.
Se considera de bajos ingresos a familias de cuatro miembros que en 2002 ganaban menos de 36 mil 488 dólares, mucho menos que el ingreso medio estadounidense de 62 mil 732 para una familia de cuatro miembros.
Del total de 9.2 millones de esas familias, 2.5 millones viven oficialmente en la pobreza, al ganar menos de 18 mil 392 dólares para una familia de cuatro miembros, según el informe.
Los trabajadores de bajos ingresos tienen tres veces más de probabilidad de no haber terminado la secundaria en comparación con los que ganan más.