De las funciones profesionales de las que cuatro personas estaban operando en distintos municipios en Durango durante este año y que fueron denunciadas, sólo de una se tiene conocimiento en la Procuraduría General de Justicia (PGJ), según informó Hilda Ontiveros, coordinadora de agentes del Ministerio Público foráneos, y Rubén López Gallegos, jefe de Comunicación Social.
Los Servicios de Salud de Durango, a través de Arturo Guerrero Sosa, jefe de Normas y Desarrollo de la Dirección de los SSD, indicó que durante el 2004 se han registrado cuatro casos en los que en distintos municipios se detectaron personas que estaban ejerciendo oficios de médicos cirujanos, así como un laboratorista químico, sin tener su cédula profesional, con lo que se procedió en forma inmediata a la clausura de los establecimientos.
Del mismo modo se interpusieron denuncias. Guerrero Sosa aseguró que habían tres querellas penales en contra de las personas que habían sido encontradas ofreciendo sus servicios sin respaldo profesional, pues en algunos casos se trataba de individuos que ni siquiera concluyeron su carrera como médicos.
La PGJ informó que según la información que tienen hasta el momento, sólo existe una que se está integrando y se trata del municipio de Tepehuanes. Aún no se ha consignado pues se están recabando más pruebas, por la presunta responsabilidad de usurpación de funciones y falsificación de documentos.
Por otro lado, en el caso de El Salto, municipio de Pueblo Nuevo, no se tuvo la información correspondiente. Hilda Ontiveros indicó que sólo tenían información de la de Tepehuanes. Por el asunto de Gómez Palacio, donde también una persona se hizo pasar por médico, Hilda Ontiveros aclaró que ésta no es su jurisdicción, dentro de la Coordinación de Agencias del Ministerio Público Foráneas.
Para el asunto de Santiago Papasquiaro, los SSD informaron que la persona que se hizo pasar por laboratorista químico había terminado sus estudios, pero no se había titulado, de tal modo que se le invitó a que realizara el trámite correspondiente y se encuentra en procedimiento; sin embargo, como en uno de los casos, no se escapó de una multa de nueve mil pesos.
Los SSD realizan constantes visitas a establecimientos y consultorios médicos, en donde revisan que haya la infraestructura adecuada para la consulta; también, que el médico esté avalado en la especialidad médica que ostenta o en el oficio por la Dirección de Profesiones de la Secretaría de Educación del Estado de Durango, y que opere conforme a las normas que establece la Ley General de Salud.
Los SSD indican que para tener la seguridad de que son atendidos por un profesional de la medicina es importante que observen la licencia que autoriza esta dependencia, con lo que se garantiza la adecuada atención médica.
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PROFESIONES
El castigo
El Código Penal del Estado indica en su capítulo V, referente a la Usurpación de Funciones Públicas o de Profesiones, en el artículo 184, que deben imponerse entre seis meses a cuatro años de prisión y de tres a doscientos quince días multa al que: ?se atribuya el carácter de profesionista sin tener título legal o ejerza los actos propios de una profesión sin título o sin autorización legal?.
De este modo, el Código Penal establece que la actuación de una persona que se ostenta como profesionista, sin serlo, tiende a una conducta delictuosa, que puede ser sancionada por las autoridades judiciales correspondientes.
En el caso de curanderos, los Servicios de Salud de Durango únicamente actúan si indican que atienden enfermedades, no así con el uso de cartas y otras artes adivinatorias, aunque sí se configura el delito de fraude en el ámbito penal.