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México, DF.- En 2003, la Tasa de Desempleo Abierto en México (TDA) se ubicó en 3.25 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA), uno de sus niveles anuales más altos desde 1998 cuando fue de 3.2 por ciento, informó el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
En un comunicado, el INEGI detalla que en diciembre de 2003, la TDA se ubicó en 2.96 por ciento de la PEA, cifra menor al 3.4 por ciento proyectado por los analistas para el último mes de 2002, pero superior al 2.12 por ciento registrado en igual mes de ese año.
De acuerdo a datos desestacionalizados, la TDA fue de 3.38 por ciento en diciembre de 2003, cifra menor a la de noviembre de 2003, de 3.97 por ciento de la PEA, abunda el organismo. Señala que en diciembre pasado, la TDA por sexo muestra que para los hombres fue de 2.78 por ciento, que significó un aumento en comparación al 2.15 por ciento en igual mes de 2002, mientras que para las mujeres fue de 3.26 por ciento, superior al 2.07 por ciento del último mes de 2003.
Refiere que con base en la Encuesta Nacional de Empleo Urbano (ENEU) que aplica en 32 de las principales ciudades del país, de enero a diciembre de 2003 la TDA de las mujeres se ubicó en 3.46 por ciento y la de los hombres en 3.12 por ciento.
El INEGI expone que la duración promedio del desempleo abierto fue de seis semanas en diciembre de 2003, dado que 46 por ciento de la población desocupada permaneció sin laborar de una a cuatro semanas, 19 por ciento de cinco a ocho y 35 por ciento restante buscó trabajo durante nueve semanas o más. El organismo apunta que la población ocupada representó 97.04 por ciento de la PEA en diciembre de 2003, en tanto que por sectores estuvo conformada en 38 por ciento en Servicios, 26.4 en el sector industrial, 22.2 en Comercio, 6.4 en Comunicaciones y Transportes y 7.0 en ?Otras actividades?.
En cuanto a la jornada de trabajo, menciona que los resultados de la ENEU muestran que en diciembre pasado 4.2 por ciento del personal ocupado laboró jornadas con duración menor a las 15 horas semanales, 13.2 por ciento trabajó entre 15 y 34 horas, 53.8 por ciento entre 35 y 48 horas, y 26.0 por ciento estuvo empleada más de 48 horas a la semana. El INEGI explica que esta última cifra refleja una ligera tendencia a laborar jornadas más largas, ya que la observada en diciembre de 2002 se ubicó en 23.7 por ciento.