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MÉXICO, DF.-El secretario general del STPRM, Carlos Romero Deschamps, consideró positivo el operativo ordenado por el Gobierno Federal para prevenir el robo de combustible en refinerías de Petróleos Mexicanos (Pemex).
El líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) consideró reprobable que algunas personas se dediquen a saquear gasolina y ofreció a las autoridades federales la colaboración del gremio y sus afiliados para denunciar el delito.
Sin embargo, consideró que el problema grave no está ahí, sino en las estaciones de servicio (gasolineras), así como en la adulteración de gasolina y la forma como se extrae el combustible del sistema de ductos.
Explicó que los concesionarios de la venta de gasolina roban importantes cantidades en sus máquinas despachadoras y permiten el abastecimiento de sus negocios con combustible adulterado, a fin de obtener más ganancias.
En este sentido, Romero Deschamps sugirió a las autoridades competentes que verifiquen si la cantidad de combustible que entra en los depósitos de las estaciones de servicio es el real y cumple con las especificaciones de calidad.
El dirigente petrolero negó que personal sindicalizado o la dirigencia de este gremio estén involucrados en el robo de combustible, pero aseguró que en caso de que se demuestre lo contrario, pugnarán por que se aplique todo el rigor de la ley contra los responsables.
Incluso, señaló que cuando fue legislador apoyó la iniciativa para modificar la ley y las penas contra quienes incurren en estos delitos, a fin de que sean más severas y no alcancen la libertad bajo fianza.
Más adelante, Romero Deschamps dijo que con base en su experiencia, puede afirmar que el robo más grave de gasolina se perpetra en el sistema de ductos de Pemex.
Explicó que, lamentablemente, no se cuenta con la vigilancia suficiente a lo largo de los miles de kilómetros de ductos por donde se transporta el combustible, que es donde se presentan los robos.
Cuando se extrae gasolina directamente de los ductos, agregó, se pone en riesgo la seguridad de miles de personas, ya que al perforarlos se presentan derrames muy peligrosos, que ya han causado accidentes, incendios y explosiones.
Es equivocada la afirmación de que para perpetrar el robo de gasolina de los ductos necesariamente se requiere de petroleros profesionales, y aunque dijo que sí son indispensables ciertos conocimientos en la materia, no es un factor que determine el saqueo.
