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BOGOTÁ, COLOMBIA.- La policía colombiana desmanteló ayer una importante red de falsificadores de dólares en la ciudad de Cali, que tenía en su poder unos cuatro millones terminados y en proceso para ser introducidos en el mercado negro.
“Nosotros entenderíamos que es un golpe estructural a una red que estaría en capacidad de producir un millón de dólares mensuales”, dijo el comandante de la policía judicial, coronel Oscar Naranjo, en entrevista telefónica.
Hasta al momento, hay 14 capturados por los allanamientos que se practicaron en horas de la madrugada en Cali, uno de los principales centros de falsificación de dólares del mundo. Cinco de los detenidos tienen antecedentes judiciales por el mismo delito en el pasado.
Las investigaciones que permitieron dar este golpe duraron cuatro meses y contemplaron más de 18 allanamientos en esta ciudad ubicada a 300 kilómetros al suroeste de Bogotá.
También en los operativos se incautaron 50 planchas para imprimir los billetes de distintas denominaciones y las prensas. Agentes del servicio secreto de Estados Unidos asistieron a las diligencias en calidad de observadores.
Los falsificadores usaban papel moneda colombiano y venezolano para imprimir los dólares, pero también papel original. Se ha establecido que los tentáculos de la red criminal llegaban hasta Miami, Nueva York y Perú, pasando por Ecuador.
El servicio secreto de Estados Unidos calcula que en Colombia se elabora el 43 por ciento de los dólares falsos del mundo, que presentan una calidad muy alta por el detalle de los billetes y el papel usado.
Naranjo explicó que esta actividad criminal se concentra en Cali por la larga tradición tipográfica y litográfica que existe en la ciudad.
El oficial reveló que también hace un mes se produjo el ingreso de una importante cantidad no precisada de dinares iraquíes para ser ocupados en la falsificación de dólares. En estos últimos operativos no se encontraron esas divisas.
La dolarización de algunas economías de la región, entre ellas la de Ecuador, ha facilitado las actividades de los falsificadores para repartir los billetes ilegales.
