EL SIGLO DE TORREÓN
Gómez Palacio, Dgo.- Ya están de vuelta en casa. Los hermanos Gracia Quiñones fueron liberados. Su madre acudió al Centro de Orientación y Observación de Menores Infractores (COOMI) en Durango. Los niños aseguran que aprendieron la lección. Sólo falta comprobar la inocencia del hermano mayor, todavía recluido en el Cereso local.
Antonio, Francisco Javier y Pablo de 13, 12 y 11 años, están con su madre, Antonia Quiñones. Dicen que en el COOMI los trataron muy bien, de los pleitos obligados con los demás huéspedes salieron bien librados. Francisco regresó con tenis ?nuevos? y Antonio volvió descalzo.
Tímidos y algo apenados, con la cabeza baja, los tres menores contaron su experiencia que inició con su detención el pasado ocho de mayo del presente año. Fue hasta las 14:00 horas del jueves 20 de mayo cuando fueron entregados a su madre, previa advertencia para que no volvieran a reincidir.
Antonio asegura que hicieron mal en tomar el cable de tres casas, pero sostiene que su hermano Homero de 17 años, no los acompañaba. ?Los polis nos dijeron que fuéramos a la casa y nos iban a soltar, pero cuando llegamos sacaron a mi hermano a moquetes y patadones?.
En cuclillas, apoyando sus brazos en una rodilla, Pablo, el más chico de los hermanos, luce sus tenis ?nuevos?, al derecho le brotan los dedos del pie que también atraviesan el calcetín, para Pablo, el calzado es nuevo, comparado con el anterior.
Antonia está más reconfortada, sus pequeños ya están en casa, dijo que gastó 800 pesos en el viaje, para realizarlo vendió algunas cosas y pidió prestado. ?Nos fuimos en una camioneta de un conocido pero no sabíamos dónde era, perdimos mucho tiempo y gastamos más gasolina?, comentó la ama de casa.
Como se informó en su oportunidad, fue el martes 18 de mayo cuando se resolvió la situación legal de los menores y por medio de El Siglo de Torreón, doña Antonia fue informada sobre la determinación de dejarlos en libertad, para lo cual debía hacer acto de presencia.
La calvario de la familia Gracia Quiñones inició con la detención de los cuatro hijos, a las 14:20 horas del sábado ocho de mayo, acusados de robar material eléctrico y causar daños a unas fincas en construcción, en el fraccionamiento San Alberto.
La detención estuvo a cargo de los agentes de la unidad F-196, Víctor Antonio Segovia Andrade y José de Jesús Velasco Montaña, quienes también capturaron a Homero Gracia Quiñones de 17 años, hermano mayor de los pequeños inculpados.
El caso de los menores llamó la atención por la tardanza de 48 horas para la integración de la averiguación previa y el traslado de los jovencitos a la ciudad de Durango, acción que fue ignorada por la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
En el Gobierno del Estado, la situación llamó la atención de las autoridades y las vejaciones que sufrieron los menores sirvieron para fijar acuerdos entre la Subprocuraduría de Justicia y el COOMI, para trasladar a los menores, probables responsables de un delito grave, lo más pronto posible.
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Dilación de la justicia
La apatía de la representación local de la Comisión Estatal de Derechos Humanos perjudica a la familia Gracia Quiñones. Los tres menores que fueron enviados al COOMI ya recuperaron su libertad. La dilación en la oficina de Asuntos Internos de Seguridad Pública, impide la aportación de pruebas, sobre la legitimidad de la detención de Homero Gracia de 17 años.
El joven se encuentra en el Centro de Readaptación Social desde el lunes diez de mayo, acusado de un delito grave que no alcanza fianza. El señalamiento de los policías aprehensores y su propia declaración, fueron elementos suficientes para su consignación.
Antonia Quiñones sigue esperando el contacto de la oficina de Asuntos Internos para conocer los avances de la investigación. La afligida madre asegura que a su hijo mayor no le han permitido presentar pruebas de su inocencia.
Desde el momento de la detención de sus cuatro hijos, la mujer sostenía: ?Tengo testigos, ellos no fueron, ellos (los tres menores) andaban en un basurero de una señora. La señora me preguntó, ¿Siempre se los llevaron? y dijo, pero si yo oí a los polis que dijeron, los vamos a llevar a su casa?.
