EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- A raíz de una denuncia presentada de parte de una derechohabiente en contra de varios médicos del Hospital del ISSSTE en esta ciudad, las autoridades de Contraloría determinaron la destitución de tres de los especialistas a quienes inhabilitó para ocupar un puesto como servidores públicos durante un año.
Lo anterior fue manifestado por José Raúl Mendoza Morquecho, director del citado nosocomio, quien agregó que la decisión de Contraloría recientemente se dio, pese a que el caso del que se trata ocurrió en agosto de 1999.
Señaló que dichas autoridades decidieron que se trató de un caso de negligencia de omisión, por no haber actuado antes que se presentara el trabajo de parto en la paciente y habérsele practicado una cesárea oportunamente.
Los médicos afectados son de apellidos De la Cerda, Pérez Casas y Díaz Velázquez, quienes pueden impugnar tal determinación ante la Secretaría de la Contraloría y además solicitar un juicio de nulidad ante el Tribunal Fiscal de la Federación, con el cual se podría ratificar o bien revocar su sanción.
En cuanto a las plazas que dejaron vacantes, expresó que de momento son ocupadas por personal interino, pues será hasta que concluya el citado juicio cuando se sabrá si dichos especialistas se reintegran a sus actividades o bien se contratará a otros.
El caso
Presentando el consabido riesgo para una mujer mayor de 35 años en su primer embarazo, la paciente concluye las 40 semanas de gestación y acude a servicio médico al Hospital del ISSSTE, donde luego de varias horas el producto muere dentro del útero.
Lo anterior provoca el enojo de la mujer y sus familiares que interponen su queja formal ante las autoridades del instituto, por lo que inicia una investigación.
De acuerdo a las conclusiones a que llegaron tras la realización de una exhaustiva indagación del caso, la paciente tiene antecedentes de diabetes, pues su mamá padece la enfermedad, sin embargo no fue detectada debido a que fue muy irregular durante el control prenatal, tanto con el médico familiar como con el especialista.
De ahí se desprende que el producto tenía un peso de 4.400 kilogramos, lo que se le denomina como macrosómico, que en determinado momento pudo haber incidido en alto porcentaje que durante el trabajo de parto un producto tan grande haya ocasionado la muerte fetal.
Sin embargo, la Secretaría de la Contraloría determinó la presunta responsabilidad de tres médicos especialistas a quienes les aplicó la sanción correspondiente.