Lima, (EFE).- Murales con diseños de la prehispánica cultura Lambayeque, de unos 1.000 años de antigüedad, fueron destruidos en plena Semana Santa en la peruana región del mismo nombre, denunciaron voceros del Museo Nacional Enrique Brunning.
"Se ha destruido parte de la historia de este pueblo", declaró el arqueólogo Marcos Fernández, uno de los responsables de la investigación y conservación de sitios arqueológicos en esa región norteña.
Fernández explicó que el pasado Viernes Santo cinco personas a caballo ingresaron a la Huaca Bandera, ubicada en el distrito de Pacora, y destruyeron los murales en su intención de buscar algún objeto valioso para los traficantes de bienes culturales.
Los denominados "huaqueros" fueron sorprendidos por el teniente alcalde de Pacora, pero huyeron antes de ser capturados.
El arqueólogo peruano dijo que existe la lamentable costumbre de "huaquear" (robar en los monumentos arqueológicos) en los días de Semana Santa por la creencia de que los muertos llegan para recuperar sus pertenencias.
Sin embargo, en la "huaca" destruida no se han encontrado hasta el momento objetos de metal precioso u otros vestigios que puedan ser comercializados en el mercado negro.
Los murales destruidos fueron registrados en 1994 por el museo Brunning y se encontraban en una pared de barro de unos seis metros de largo.
Constaban de diseños con pintura roja y relieves polícromos de un dragón o brujo con ojos alados, característico de la cultura Lambayeque.
El especialista informó de que el museo no cuenta con ninguna partida económica del Estado para las labores de conservación y seguridad de los sitios arqueológicos que están en su jurisdicción.
En ese sentido, la huaca atacada no tenían ningún tipo de seguridad permanente y los únicos patrullajes que se pueden realizar se hacen en coordinación con las autoridades locales y la policía.
