El estudio Proyección XXI que planea el correcto crecimiento y urbanización del municipio de Durango, afirma que en el 66 por ciento del área que está vendida, invadida o en proceso de regularización es acaparada a través de la especulación.
El estudio indica en su proceso de ?Diagnóstico-Pronóstico y Evaluación?, que las reservas territoriales han sido una realidad y una falta de disposición de suelo que sea susceptible a la incorporación del desarrollo urbano.
El documento también indica que existe ineficiencia de mecanismos para la incorporación del suelo rural y/o ejidal y para tal efecto debe existir participación de los tres niveles de Gobierno; también de la ciudadanía y de la efectiva aplicación de la legislación agraria.
Aunque en muchos terrenos que pueden ser ejidales o comunales puede existir un correcto aprovechamiento de la tierra, en la mayoría de los casos existen acaparadores que especulan con grandes extensiones de tierra.
El Programa de Desarrollo Urbano 2000 determinó estrategias de ocupación para las reservas territoriales, que a pesar del proyecto, aún no han sido destinadas.
Las reservas territoriales que se prevén en el estudio de Usos, Destinos y Reservas hacia el año 2020 son de tres mil 250 hectáreas, y durante el 2002 se previó que aquéllas pudieran ser adquiridas u ocupadas en corto, mediano y largo plazos.
En el corto plazo, que se caracterizó entre el año 2000 al 2005, la superficie programadas a ocupar fue de 421 hectáreas. Para tal efecto se plasmó una estrategia de organización de fraccionamientos autorizados, así como con la consolidación de los asentamientos humanos regulares e irregulares. También se había previsto la saturación de los terrenos baldíos y las áreas vacantes que se encontraban dentro de la mancha urbana. De este modo se proyectó así vivienda para unas 605 mil 710 personas, con una densidad de 75.26 habitantes por hectárea en promedio.
Al mediano plazo, entre el 2005 al 2010, como reserva territorial se previó la ocupación de 842 hectáreas, con lo que se programó el desarrolló de áreas previstas y señaladas como reservas territoriales patrimoniales. Todavía mantienen el objetivo de evitar la dispersión urbana para optimizar los usos y destinos futuros, para una población de 711 mil 420 habitantes con una densidad de 84 habitantes por hectárea. El largo plazo tiene una superficie programada de dos mil 045 hectáreas. El estudio dice que actualmente no es correcto, desde el punto de vista costo-beneficio, cambiar su uso de suelo por las grandes pérdidas económicas que representaría para el municipio urbanizar sitios muy alejados de la ciudad.
Los regidores de la Comisión de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento, entre ellos Mario Garza Escobosa, así como el líder social de la colonia Gobernadores, Félix Rodríguez Nájera, y el diputado Sergio Carrillo Arciniega, convergen en la imperante necesidad de la creación de reservas territoriales, para lo que debe existir voluntad política, a través de una real aplicación del proyecto de Desarrollo Urbano hacia el 2020.
LEYES
Obligaciones de los Ayuntamientos
La Constitución Política del Estado de Durango en su artículo 110 determina que:
-Los ayuntamientos, en los términos de las leyes federales y estatales relativas tienen facultades y obligaciones.
-Aprobar y administrar la zonificación y planes de desarrollo regional, en concordancia con los planes generales de la materia.
-El Ayuntamiento es el responsable de autorizar, controlar y vigilar la utilización del suelo, en el ámbito de su competencia, en sus jurisdicciones territoriales y debe participar en la creación y administración de sus reservas territoriales.
FUENTE: Constitución Política del Estado de Durango.
