Se repiten irregularidades administrativas de 1999, pero se estima que ahora por cantidades más grandes
A mediados de 1999, el Sistema Estatal de Colegio de Bachilleres vivió un escándalo por irregularidades administrativas por poco más de dos millones de pesos en que incurrió el director general de ese entonces, Ricardo Navarrete Salcido; la historia podría repetirse con quien lo sucedió en el cargo, Manuel de Jesús Reyes Ortiz, pero con una cantidad posiblemente más elevada.
Navarrete Salcido fue retirado por la Junta Directiva porque pesaban sobre él señalamientos de desorden administrativo, desviación de recursos por presentar adquisiciones a la biblioteca de subsistema, pago a proveedores y de mobiliario, así como excesos de gastos de compensación y algunos viáticos.
El 20 de julio de 1999 entró Reyes Ortiz a la Dirección General del Cobaed y ante su inminente salida, por cambio de Gobierno, el contralor Luis Enrique Benítez Ojeda dio a conocer que una primera auditoría arrojó como resultado irregularidades en la contratación de personal en favor de amigos y familiares, en la asignación de excesivos sueldos y salarios.
Sin embargo, el Contralor afirmó que ya recibió los resultados de la segunda auditoría y que es cuestión de horas o de días para que dé a conocerla con detalle, en tanto hay rumores de que las irregularidades en el manejo de los recursos económicos son cantidades más altas que las que se encontraron cuando Reyes Ortiz tomó las riendas del Cobaed.
Cuándo se le pregunta a Reyes Ortiz sobre la supuesta asignación a familiares, amigos y personas cercanas a los funcionarios, y qué tanta culpa tiene, afirma que todos tienen su parte de responsabilidad y que él acepta la suya porque quien contrata es la Dirección General, pero a propuesta de directores de planteles, funcionarios, sindicato y hasta los propios trabajadores y personas que acuden directamente a pedir empleo.
En cuanto a las supuestas irregularidades administrativas afirma que existe una contraloría interna y una externa, debido a que esta institución recibe recursos federales y estatales ?que en este año podría alcanzar los 170 millones de pesos-.
?Lo que pasa es que hay eventos que ya se venían realizando cuando tomamos la Dirección General que se realizan por tradición en el Cobaed?, indicó.
En este sentido, mencionó que hay eventos académicos, artísticos y deportivos; de aniversario de los planteles, las reuniones regionales y nacionales al que asisten el director general, o los subdirectores académicos y administrativos, y otros eventos en los que participa la institución, son actividades en las cuales hay que participar y es lo que origina gastos, afirma Reyes Ortiz.
Inclusive, aclaró que desde hace dos años no se realiza la convivencia navideña porque no hay recursos, además de que la Dirección General emprendió medidas de austeridad por falta de fondos.
?Sí estoy satisfecho por lo realizado, y estoy listo para partir?, reitera.
A mediados de 1999, Guillermo Adame Calderón era el subdirector administrativo del Cobaed y fue el que comenzó a hacer los señalamientos de malos manejos administrativos; inclusive, optó por separarse del cargo para facilitar la realización de una auditoría, que le dio la razón.
Sobre la situación en que se encuentra el Cobaed, se entrevistó a dos ex directores, Víctor de la Barrerera Fraire, quien es actualmente director del Sistema Descentralizado de Agua Potable y Alcantarillado, y al propio Ricardo Navarrete Salcido, director de la Universidad José Vasconcelos. El primero prefirió no hablar del tema, y el otro afirma que dejó todo arreglado.
Guillermo Adame Calderón regresó al Cobaed cuando la Junta Directiva dio a conoce su decisión de retirar a Navarrete Salcido, pero a la llegada de Adrián Laveaga Hernández como secretario de Educación salió, y actualmente es titular de la Dirección Municipal de Servicios Públicos.
