TORREÓN, COAH.- La ola de hechos relacionados con enfrentamientos entre grupos de narcotraficantes, entre ellos el descubimiento de una fosa clandestina en Ciudad Juárez, Chihuahua, levantó reacciones a lo largo del territorio nacional.
La Procuraduría General de la República (PGR) detuvo a 16 elementos de la Policía Judicial del estado de Chihuahua por su presunta responsabilidad en la ejecución e inhumación clandestina de 11 cadáveres en una casa de seguridad de los Carrillo Fuentes.
Los elementos ya fueron trasladados a ciudad de México, para ser interrogados en la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), donde también ya comparecen las tres personas capturadas el martes.
Luego de que el subprocurador José Luis Santiago diera a conocer las sospechas de la participación de elementos de la Policía Judicial estatal, la Procuraduría de Justicia de Chihuahua, detuvo a los 16 sospechosos.
Coahuila tampoco es ajeno a las reacciones generadas por la declaración titular de la PGR, Rafael Macedo de la Concha, en el sentido de que los ajustes entre narcotraficantes han ocasionado una crisis que mantiene en jaque al país.
El alcalde de Piedras Negras, Claudio Bress Garza, aseguró ayer que el problema del narcotráfico es tan grave en la medida que cada quien lo considere, pero “no voy a esperar una situación explosiva como sucede en otras ciudades para decirlo en forma pública”, afirmó.
Es preocupante, dijo, la falta de elementos de la PGR en el combate al narcotráfico en la frontera con Estados Unidos, donde el problema va en aumento.
Entrevistado en el marco del convenio Alianza Coahuilense, celebrado ayer en esta ciudad, Bress Garza destacó que las fronteras son cruces naturales hacia Estados Unidos, donde el Gobierno norteamericano aprieta y es indudable que los narcotraficantes buscan refugiarse en otros lugares.
(Información adicional de SUN-AEE).